
La recuperación económica de España o Irlanda se pone como ejemplo en cada reunión del Eurogrupo o de la Comisión Europea. Desde estas instituciones se atribuye el éxito económico a sus políticas audaces y decisivas. Sin embargo, los ajustes presupuestarios y las reformas estructurales podrían no tener nada que ver con la recuperación, o al menos así lo argumenta el 'plucking model' del influyente Milton Friedman.
Este economista estadounidense explicó brevemente y sin demasiada profundidad que la fuerza y rapidez de las recuperaciones económicas estaban totalmente correlacionadas con la intensidad de las recesiones previas, lo que explicaría que España, Irlanda, Lituania, Estonia o Letonia sean ahora los países de Europa que crezcan con mayor fuerza.
Esta idea la recoge el 'think tank' Bruegel. Es cierto que Estonia y Letonia están experimentando un crecimiento del PIB real mucho más rápido que el resto de Europa desde 2010 (un crecimiento medio del 5%). El 'plucking model' de Friedman predice exactamente ese tipo de recuperación tras una severa recesión, ya que vuelve la reactivación del crecimiento independientemente de las políticas implementadas.
Según explica Friedman en su modelo, la producción de un país se mueve a lo largo de un techo (crecimiento potencial). La tasa de crecimiento real depende de la intensidad con la que se estén usando el factor trabajo (mano de obra) y el factor capital en el sistema de producción. De este modo, el comportamiento del PIB está marcado por shocks de demanda mientras que el techo (crecimiento potencial) es más estable y depende de cambios tecnológicos, demográficos, regulatorios, etc.
Este modelo señala dice que la intensidad de las recuperaciones sí depende de la fuerza con la que se ha producido la recesión. En cambio, las recesiones no tienen relación con el tamaño del ciclo expansivo anterior y solo son sólo producto de eventos poco frecuentes (crisis financieras o hechos parecidos). Las fluctuaciones de una economía funcionan como una cuerda de guitarra que siempre vuelve a su sitio. Y la velocidad con la que vuelve a ese sitio depende de lo que se haya estirado: las grandes recesiones siempre van seguidas de grandes recuperaciones hasta que la economía vuelve a alcanzar niveles pre-crisis.
Los investigadores de Bruegel también hacen hincapié sobre la escasa profundidad con la que dotó Friedman a su modelo. Además, tampoco fue demasiado preciso ni exacto, ya que simplemente expuso la idea y mostró algunos ejemplos que parecían fundamentar su argumento.
A pesar del escaso contenido del modelo parece que en la práctica funciona bastante bien. En la Eurozona, los países bálticos fueron los que sufrieron una mayor contracción (junto con Grecia, que ahora empieza a mostrar los primeros signos de recuperación), y son estos países los que se han recuperado con mayor fuerza una vez que sus economías comenzaron a expandirse. Irlanda, Finlandia o España son también buenos ejemplos.
