
El Gobierno de Estados Unidos está considerando la intervención de las dos grandes agencias semiestatales de garantías hipotecarias del país, Fannie Mae y Freddie Mac, para mantenerlas bajo la dirección de un administrador. Según indica el New York Times, la operación se llevaría a cabo en el caso de que su situación financiera empeorase. Los títulos de ambas entidades en Estados Unidos se desplomaron ayer en bolsa y marcaron sus precios mínimos desde 1991.
En concreto, las acciones de Freddie Mac perdieron un 22% para cerrar en los 8 dólares, mientras que las de Fannie Mae cedieron un 13,8%, hasta 13,20 dólares.
Los rumores acerca de los problemas financieros de Freddie Mac y Fanie Mae, que han registrado pérdidas por valor de 11.000 millones de dólares en los últimos meses, llevan días circulando, en especial después de que se publicara una nota de analistas en la que se especulaba con la necesidad de una captación masiva de recursos por parte de ambas.
Así mismo, también suena con fuerza la posibilidad de que Washington pudiera tomar cartas en el asunto mediante la compra de parte o de la totalidad de las agencias.
Control estatal
De acuerdo a la información publicada por el rotativo estadounidense, que cita fuentes cercanas a la operación, el Gobierno tomaría el control de las hipotecarias, que pasarían a estar bajo tutela estatal a través de la figura de un administrador.
Como consecuencia, las acciones de Fannie y Freddie podrían perder gran parte o incluso todo su valor, y cualquier pérdida en los préstamos a la vivienda que aseguran sería financiada con fondos públicos.
Otra de las medidas que se plantea la Administración estadounidense es la de reformar la legislación, de forma que se establezca una garantía gubernamental que cubra la deuda de 5 billones de dólares que arrastran las dos agencias. Sin embargo, el diario indica que esta es la opción menos atractiva, ya que doblaría el endeudamiento público.
Debate de altura
Ayer mismo, el secretario del Tesoro estadounidense, Henry Paulson, salía al paso de las especualciones acerca de las dificultades que atraviesan Freddie Mac y Fannie Mae al asegurar que ambas compañías estaban "adecuadamente capitalizadas".
El debate lo continuó el ex presidente de la Fed de San Luis, William Poole, que rebatió las afirmaciones de Paulson manifestando que "estas empresas son insolventes". A este respecto, Poole añadió que sí deberían ser intervenidas por Washington.