
El año 2014 se cerró con 477.900 parados menos, una reducción que deja el número total de desempleados en 5,45 millones, según la última Encuesta de Población Activa del INE. La tasa de paro bajó, respecto a 2013, del 25,7% al 23,7% y por primera vez después de seis años de destrucción constante, España generó empleo: 433.900 puestos.
Tras años de crisis, son muchas las preguntas que vienen a la mente, como por ejemplo cómo se conseguirá recolocar a los más de dos millones de parados de los últimos años o cómo se logrará reducir el alto empleo de bajo valor añadido que genera hoy España. Es cierto que aún queda mucho por hacer para lograr que el mercado laboral español vuelva a ser saludable, -la OIT no cree que el paro baje del 21% hasta, al menos, 2019. Pero hay datos que demuestran que tal vez 2014 marcó un punto de inflexión.
1.- Población activa
Uno de ellos es la evolución de la población activa, que forman las personas de 16 años o más que trabajan o están en disposición de hacerlo y buscan empleo activamente. Es sobre el total de población activa que se mide la tasa de paro. Ésta se ha reducido trimestre tras trimestre por la marcha de autóctonos e inmigrantes que dejan el país o aquellos que no buscan empleo por el llamado efecto desánimo: dejan de buscarlo porque creen que no lo van a encontrar.
Pues bien, un síntoma de que quizá empieza a mejorar la confianza es que en el cuarto trimestre de 2014 la población activa experimentó un incremento de 95.200 personas, hasta un total de 23,02 millones. El número de españoles activos aumenta en 87.400 y el de extranjeros, en 7.800. Es el primer crecimiento del número de activos en un cuarto trimestre desde 2009.
En cambio, en términos anuales (diciembre de 2014 sobre diciembre de 2013) la población activa se redujo en 44.000 personas, según el INE debido al descenso de la población en edad de trabajar (16-64 años), cuya causa fundamental es el envejecimiento de la población. No obstante, se ha atenuado el descenso de activos que se venía observando en trimestres anteriores. Un ejemplo: la caída de septiembre de 2014 sobre septiembre de 2013 fue de 241.700. En el caso de junio, de 232.000 y en el caso de enero de 2014 sobre enero de 2013, de hasta 424.500.
2.- Mejora la ocupación
El año 2014 se cerró con 17,56 millones de personas trabajando, una cifra que queda lejos de los 20,7 millones que había a finales de 2007. Ahora bien por primera vez en un cuarto trimestre desde el año 2006, la ocupación registró un crecimiento, de 65.100 personas.

También creció la ocupación en el conjunto de 2014. En concreto, se crearon alrededor de 433.900 puestos de trabajo, lo que supone la primera creación de empleo en un conjunto de año después de seis años destruyéndolo.
3.- Crece la contratación indefinida
En los últimos doce meses, el empleo a tiempo completo ha aumentado en 367.400 personas y el empleo parcial, en 66.500. Más datos, respecto a finales de 2013, el número de asalariados ha subido en 389.700 personas y el de trabajadores por cuenta propia, en 43.400.
Aunque la temporalidad y la precariedad siguen siendo elevadas, hay un dato positivo y es la mejora de la contratación indefinida: el empleo fijo se ha incrementado en 212.800 personas y el temporal, en 176.900. Solo a modo de ejemplo, en 2013 el empleo indefinido se redujo en 269.500 personas respecto a 2012 mientras el temporal aumentó en 81.300.
Por sectores, en el conjunto de 2014 la ocupación aumentó en 415.700 personas en el sector privado y en 18.100 en el sector público.

4.- Baja el paro juvenil y el de larga duración
Los jóvenes han sido uno de los colectivos más castigados por la crisis. No obstante, la tasa de paro juvenil bajó casi seis décimas en el último trimestre de 2014, pasando del 52,39% al 51,8%. Así, el porcentaje de parados menores de 25 años sobre el total de activos se situó en su nivel más bajo en casi dos años.
Entre los más afectados se encuentra el colectivo de los 20 a 24 años. Sin embargo, en el cuarto trimestre del año pasado, el paro entre estos jóvenes bajó en 38.500 personas, mientras que el de los jóvenes de 16 a 19 años retrocedió en 15.500 personas.
En concreto, el número de jóvenes en paro menores de 25 años bajó en 93.400 personas en 2014, lo que supone un 10,3% menos que en 2013, situándose la cifra total de jóvenes en situación de desempleo en 813.700 al finalizar el año pasado.
Por su parte, a cierre de 2014 había un total de 757.000 personas menores de 25 años ocupadas, por encima de los 745.400 que había a cierre de 2013.
Además, el número de parados de larga duración (más de un año en el desempleo) se redujo en 211.800 personas en 2014, un 7,1% menos que en 2013, hasta situarse en 2,75 millones de personas
5.- Paro por CCAA
El paro bajó en 2014 hasta en en 16 comunidades autónomas, principalmente en Comunidad Valenciana, Cataluña y Madrid. La única región donde aumentó el desempleo el año pasado fue País Vasco, con 700 parados más que en 2013.
Por el contrario, solo tres comunidades destruyeron empleo en 2014: Castilla-La Mancha, que perdió 6.100 ocupados; Galicia, con 2.200 empleos menos, y Asturias, donde la ocupación cayó en 1.000 personas.