
La economía española desaceleró su crecimiento en el tercer trimestre al registrar un incremento del PIB del 0,5%, una décima inferior al logrado en el periodo anterior, tal y como había avanzado hace una semana el Banco de España. De Guindos aseguró tras las cifras que se reafirma la velocidad de crucero que lleva el país.
Según el avance de los datos de la Contabilidad Nacional Trimestral publicado por el INE, con este repunte trimestral del PIB se encadenan cinco trimestres en positivo.
La tasa interanual del PIB se situó en el 1,6% en el tercer trimestre, tres décimas más que en el trimestre anterior, registrando de este modo su cuarta tasa positiva tras diez trimestres consecutivos de retrocesos interanuales.
Los datos de Estadística son aún provisionales y se conocerán a nivel desagregado el próximo 27 de noviembre. El INE recuerda que se trata de la primera publicación del avance del PIB trimestral realizada en la base contable 2010, y por tanto, elaborada de acuerdo con el nuevo estándar metodológico obligatorio de la Unión Europea. Incluye el gasto en I+D+i, el gasto militar y el generado por actividades ilegales.
Amenaza de las economías europeas
El Banco de España en su último boletín económico explicó que el parón de las economías europeas implicaba riesgos para el cumplimiento de las previsiones españolas.
El supervisor subrayaba que durante el tercer trimestre "se prolongó la pauta de recuperación que se empezó a perfilar el año pasado", apoyada en la progresiva normalización de las condiciones de financiación, el mantenimiento de niveles de confianza "relativamente robustos" y la "favorable evolución del mercado laboral".
No obstante, cree que estos dos últimos elementos cedieron algo de dinamismo en los meses de verano, lo que, a su parecer, puede explicar la "ligera ralentización" que habrían experimentado el consumo privado y la inversión en equipo en este periodo.
En cualquier caso, el Banco de España confirmaba el escenario de paulatina recuperación que anticipó en el informe trimestral de julio, con un crecimiento del PIB del 1,3% para este año y del 2% en 2015. Sin embargo, avisa de que los riesgos de desviación a la baja se han acentuado en los últimos meses por el empeoramiento de las perspectivas de la economía internacional, en particular de la zona euro.
El supervisor financiero estima que la demanda interna avanzó en el tercer trimestre a un ritmo del 0,6% en tasa intertrimestral, mientras que la demanda exterior habría tenido una contribución "levemente negativa" (-0,1%) al avance del producto.