
Uno de las bombas de relojería para la economía mundial durante los próximos meses continuará siendo el incremento de la desigualdad y la continua desaparición de la clase media. En un momento en que parte de las tensiones geopolíticas han tenido su origen en las revueltas sociales, algunos expertos señalan que en 2015 la brecha social seguirá ensanchándose postulándose como una losa más que fomente el conocido como "estancamiento secular".
"Esperamos que este tema reciba una importante atención durante 2015", indican desde Roubini Global Economics mientras señalan que el incremento de la desigualdad económica tendrá distintos impactos a lo largo del mundo. "Desde un incremento del comercio a la globalización, la tecnología o un oferta de trabajadores mundial al alza reducen el valor del empleo", aseguran.
Para la consultora capitaneada por Nouriel Roubini, esta situación tendrá un importante impacto en el crecimiento económico. A corto plazo incrementará el ahorro, "aumentando la posiblidad de un estancamiento secular", afirman. Pero, ¿qué significa esto?. Por un lado, un aumento del ahorro y un recorte del gasto tendrán un impacto en el crecimiento económico potencial, limitando la implantación de medidas que ayuden a cerra la brecha de producción.
"Esto obligará a las economías avanzadas a tener que apoyarse en la inflación de activos, generando posibles burbujas, para mantener la demanda, ya que el mecanismo de transmisión monetario convencional no funciona", explican desde RGE.
Proteccionismo e inestabilidad
Hasta la fecha, el impacto de la globalización se ha notado en la forma de distribuir el empleo que ha sido transferido a países con una mano de obra más barata. Dicho esto si los avances tecnológicos reemplazan parte de esos empleos, así como puestos de trabajo dentro del sector servicios, nos encontraríamos con un problema descomunal, no sólo económico sino también social y político.
La pregunta que formulan desde RGE es si las mejoras a nivel tecnológico conseguirán paliar esta situación mediante gracias a un mayor crecimiento económico o acabarán por forzar una redistribución de la riqueza, restricciones en el flujo de trabajadores y un mayor proteccionismo que genere más inestabilidad. Un claro ejemplo para la consultora es la potencial ruptura de Reino Unido con la Unión Europea.