El directo del Instituto Juan de Mariana, Juan Ramón Rallo, cree que a veces puede ser racional pedir más impuestos para que los servicios públicos incrementen su calidad y cobertura, pero no cree que sea algo legítimo.
Como explica Rallo en su blog personal, "en muchos casos puede ser racional reclamar mayores impuestos, pero no significa que sea legítimo. Mientras los impuestos sean figuras tributarias generales y no particulares, mi deseo de mayores impuestos implica que otros también estarán forzados a abonar mayores impuestos, aún cuando esos otros no deseen efectuar un mayor consumo de los servicios estatales costeados con el nuevo régimen tributario".
Y es que, Rallo argumenta que "dentro de un sistema estatista, mis preferencias sobre los servicios públicos sólo pueden materializarse mediante su universalización coactiva, dado que todos debemos costear un servicio que tenemos derecho a consumir todos por igual, la modificación de una de las partes de ese sistema necesita de la modificación del todo".
Ante esta situación en la que las peticiones de unos obligan a otros de forma coactiva a proceder sin opción a renunciar, es decir, si los impuestos suben pagan más impuestos los que han reclamado el incremento fiscal como los que no lo han hecho. Por eso, Rallo cree que es posible una alternativa liberal, pues "el sistema estatal dista de ser óptimo".
Con una alternativa liberal,"si una mayoría de ciudadanos desea gastar un mayor porcentaje de su renta en mejorar la educación que reciben sus hijos podrán hacerlo sin que el resto de ciudadanos que no desean hacerlo tengan la obligación de hacerlo", sentencia Rallo.
Y es que, para el director del Instituto Juan de Mariana cree que esta es "la ventaja de una sociedad y de un mercado libre, que cada cual puede lograr sus fines sin necesidad de impedir que otras personas consigan los suyos".
"Es bueno para el ser humano que cada cual pueda decidir libremente qué parte de su renta decide destinar a cada finalidad sin ejercer la coacción sobre sus vecinos", culmina Juan Ramón Rallo.
"La sanidad debería privatizarse"
