La agencia de calificación Fitch ha rebajado el rating de Italia un escalón, desde 'A-' hasta 'BBB+' con perspectiva negativa, lo que deja la puerta abierta a nuevas rebajas en los próximos meses.
En su informe, Fitch alude a la incertidumbre generada tras de las elecciones italianas del pasado 24 y 25 de febrero. Piensa que es poco probable que se pueda formar un nuevo gobierno estable en las próximas semanas.
El aumento de la incertidumbre política y un contexto poco propicio para nuevas medidas de reforma estructural constituyen un shock adverso para la economía en medio de su profunda recesión, alerta la agencia.
Asimismo, apunta que los datos de PIB correspondientes al cuarto trimestre de 2012 confirman que la recesión en curso en Italia es una de los más profundas de Europa.
La posición desfavorable de partida y algunos acontecimientos recientes, como la inesperada caída en el empleo y los indicadores de sentimiento persistentemente débiles aumentan el riesgo de una recesión más prolongada y más profunda de lo que se esperaba. Fitch espera una contracción del PIB del 1,8% en 2013, tras la caída del 2,4% en 2012.
Debido a la recesión más profunda y su impacto negativo sobre déficit global, la deuda bruta del gobierno alcanzará su punto máximo en 2013, cuando rondará el 130% del PIB, frente a la estimación de Fitch a mediados de 2012 de un 125%.
La advertencia de Moody's y S&P
