
El estado de salud de la economía europea exige de medidas contundentes. Es por eso que Bruselas estaría diseñando una especie de 'Plan Marshall' que supondría una inyección de 200.000 millones de euros en infraestructuras, energía y tecnología para estimular el crecimiento en los países de la UE más castigados por la crisis.
Según publica hoy el diario El País, España sería uno de los países que se beneficiaría de este plan de reactivación económica que prepara Bruselas y que se presentaría de forma oficial en la reunión de jefes de Estado y de Gobierno de finales del mes de junio, conocida ya como la Cumbre del Crecimiento.
Esta fuerte inyección de dinero, "un gran plan de inversión en infraestructuras, energía verde y tecnologías avanzadas, contaría con la participación del sector privado, según fuentes europeas citadas por el diario de Prisa, puesto que el objetivo es que no cueste dinero, o si no que cueste lo menos posible y que no aumente la deuda de los eurosocios.
La rebelión en Europa contra la política alemana de austeridad total es un hecho y la misma Merkel parece no sólo aceptarla sino tratar de sumarse a ella y dirigirla, visto el anuncio que realizó este sábado al hablar de una "agenda del crecimiento", que sin olvidar el control fiscal introduce también la necesidad de estimular el crecimiento económica de la eurozona.
Dentro de estos planes de estímulo, el Banco Europeo de Inversiones (BEI), una institución que hasta ahora no estaba ayudando cuando se la ha necesitado, se presenta como la herramienta preferida para acometer las inversiones, crear empleo y crecer. Una opción sería capitalizarlo. También es probable que se recurra a la ingeniería financiera de avales y eurobonos, a vehículos financieros sofisticados o, incluso, a crear una agencia europea de infraestructuras.