
El déficit del Estado se situó en 37.016 millones de euros en los nueve primeros meses del año, el 3,42% del PIB, lo que supone un 16,8% menos que en el mismo periodo de 2010, cuando alcanzó los 44.496 millones, según ha adelantado el secretario de Estado de Hacienda, Juan Manuel López Carbajo.
Este resultado fue consecuencia de unos pagos que se situaron en 112.538 millones de euros, un 16,8% menos, mientras que los ingresos sumaron 75.522 millones de euros, un 16,7% menos.
En términos de caja, que computa los ingresos y gastos que efectivamente se han realizado durante el periodo, el Estado alcanzó un déficit de 31.081 millones de euros, inferior al déficit de 37.939 millones de 2010.
Los ingresos no financieros totales acumulados durante los primeros nueve meses del año ascendieron a 129.443 millones de euros, lo que supone un ligero incremento del 0,8% respecto a los obtenidos en el mismo periodo de 2010. Los ingresos tributarios, los más significativos, alcanzaron los 118.793 millones, un 0,5% más que un año antes.
El secretario de Estado de Hacienda, Juan Manuel López Carbajo, quien presentó las cuentas, ha indicado que las cifras acumuladas hasta septiembre apuntan al cumplimiento del objetivo para este año.
El déficit presupuestario sólo contabiliza el del Estado, excluyendo el de las 17 regiones autónomas. Para 2011, el gobierno apuesta por un déficit presupuestario del 4,8% del PIB y un déficit global del 6% del PIB. "Para llegar hasta el 6% comprometido, las comunidades autónomas y las entidades locales tendrán que cumplir también sus objetivos de reducción de déficit para este año", ha advertido el Gobierno en un comunicado.
El objetivo de déficit que contempla el Gobierno para este año es del 6%, una reducción considerable desde el 11,1% de 2009 y el 9,2% en 2010, para lograr un 4,4% en 2012. Los analistas consideran que el derroche de las comunidades autónomas y el exiguo crecimiento del Producto Interior Bruto impedirán que España cumpla esas metas.