
El ex presidente del Gobierno Felipe González se ha mostrado hoy favorable a la reforma del sistema público de pensiones para poder "garantizarlas durante los próximos 40 años", y ha recordado que quienes rechazaron la que se hizo en 1985, después la defendieron como "imprescindible e intocable".
González ha defendido este cambio en un mitin celebrado en la localidad valenciana de Burjassot, donde ha reconocido que "las malditas reformas son inevitables" y ha dicho que debería ser "la gente humilde y los trabajadores" los que exigieran la renovación del sistema para poder garantizar "un sistema solidario".
"La reforma de pensiones de 1985 costó rechazo, protesta e incomprensión por parte de quienes hoy la defienden como imprescindible e intocable. Lo mismo digo ahora, hay que reformar esta ley, que ha durado 25 años, para tener garantía de pensiones durante los próximos 40 años", ha manifestado.
González ha asegurado que respeta el sistema individualizado de capitalización de otros países, "con el que cada uno se hace su propia pensión", porque este método "ahorra y crea magníficos negocios", si bien no es partidario del mismo, porque "hace que desaparezca el sistema de solidaridad intergeneracional".
Reformas duras pero imprescindibles
"Las reformas son duras, pero son imprescindibles. Hay que hacer una gran reconversión", y España "es un país más adaptable" que otros, ha insistido el ex presidente del Gobierno, que "lo único" que tiene que reprochar al Ejecutivo actual es "que haya tardado tanto tiempo en ver lo que le venía encima".
Sobre esto último, considera que el PP no debería decir "tonterías", porque "se presentó a las elecciones de 2008 con un programa que prometía un 4 por ciento de crecimiento económico", lo que evidencia que "tampoco lo vieron venir".
"La gente cree que es la peor crisis, y es dura, pero en 1982 llevábamos meses de retraso y todos los indicadores de crecimiento eran negativos desde la muerte del protector que algunos añoran", sin embargo "se lograron sentar las bases de la cohesión social" a través de numerosos cambios legislativos y el país consiguió prosperar, ha remarcado.
"En ningún país se ha pasado de 4.000 dólares de renta per cápita a 34.500 en sólo 30 años", ha señalado González, quien considera España "necesita recuperar algunos elementos de confianza, con seriedad y esfuerzo".
"Hacer más con menos"
El ex presidente ha recordado que durante los años de bonanza económica "todo el mundo ganó dinero y circuló a toda pastilla", pero se hacía sobre créditos que había que devolver a los bancos, por lo que se gastó "lo que no producíamos y más de lo que ahorrábamos", con la consiguiente pérdida de "competitividad y productividad".
Ahora "se trata de hacer más con menos" y lograr una verdadera economía productiva y "no de cuento", con una reforma laboral y de la negociación colectiva que atienda a criterios de competitividad, a pesar de que "algunos por ignorancia y otros por mala fe meten palos en la reforma para que no salgamos".
"A veces hacemos las cosas que tenemos que hacer para mejorar las cosas, pero no lo sabemos explicar. A veces tenemos razón en lo que hacemos, pero no sabemos porqué la tenemos", ha concluido.