
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, ha advertido hoy de que algunos países podrían perder su credibilidad fiscal como consecuencia de los elevados déficit generados por las consecuencias de la crisis económica, lo que lastraría la confianza y podría perjudicar la recuperación de la economía.
"Las posiciones fiscales son mucho más diversas de lo que uno podría pensar. Algunos países están en una posición relativamente favorable porque su gestión pasada fue acertada y prudente, mientras que otras están muy cerca de perder su credibilidad", aseguró el banquero en una entrevista con el diario francés Le Monde.
Trichet lanzó un claro mensaje a los países miembros y señaló que Todos los Estados deben tener una estrategia fiscal creíble a medio plazo para los hogares, negocios e inversores. "Si no tienen confianza en la sostenibilidad de las finanzas públicas a medio y largo plazo, se consume menos e invierte menos", advirtió.
"El éxito de la recuperación en Europa depende de la confianza de los inversores en la solvencia de los emisores soberanos", recalcó el máximo responsable del BCE, quien aclaró que si no existe esta confianza, los inversores exigirán mayores tipos de interés de mercado, lo que penalizaría a los sectores público y privado del país en cuestión.
Sobre el dólar fuerte
Trichet también consideró que es importante que las autoridades de EEUU se muestren a favor de un dólar fuerte, como hizo ayer el presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), Ben Bernanke.
El máximo responsable de la política monetaria de la Eurozona ha destacado que "es importante que las autoridades estadounidenses señalen que a EEUU le interesa un dólar fuerte". "Estoy completamente de acuerdo con este análisis", asegura.
"Añadiría que creo que la fortaleza del dólar dentro de un conjunto de divisas que fluctúan interesa no sólo a EEUU, sino a la comunidad internacional entera", dijo Trichet.
Prudencia e incertidumbre
El presidente del BCE ha recomendado que ante la situación económica hay que optar por la prudencia y asegura que, pese a que se ha cerrado el periodo de "caída libre" de la economía mundial, todavía hay "muchas incertidumbres".
"Lo que observamos ahora es más favorable de lo que habíamos proyectado hace algunos meses" pero "hay que ser prudentes" porque "todavía hay muchas incertidumbres, tanto a nivel mundial como a nivel de la zona euro", afirmó el responsable europeo.
Según Trichet, el crecimiento económico de la zona euro del segundo trimestre, cifrado en un 0,4%, confirma que "hemos salido del periodo de caída libre" que marcó los seis meses posteriores a la quiebra de Lehman Brothers, en septiembre de 2008.
Al mismo tiempo, "confirma nuestro escenario de base, el de una recuperación progresiva y gradual de la economía". Pero aún así, "la incertidumbre, repito, es una característica importante del periodo en el que estamos".