Valencia
El tradicional motor exportador valenciano se enfrenta a la tormenta de la guerra comercial por los aranceles con una tendencia negativa que arrastra de los dos últimos años en que suma descensos de sus ventas a otros países. Los dos primeros meses del año vuelven a repetir las cifras a la baja en el volumen general y ello a pesar de que uno de los grandes sectores internacionales valencianos, la alimentación, crece a más de dos dígitos.
Y es que casi tres de cada diez euros de lo que la Comunidad Valenciana ha exportado fuera de España en los meses de enero y febrero es comida, según revelan las estadísticas oficiales de Comercio.
En conjunto, las ventas de productos valencianos a otros países alcanzaron los 6.240 millones de euros, un 2% menos que en el mismo periodo de 2025. Por sectores, el alimentario fue la gran excepción, ya que creció un 11,5%, con 1.805 millones de euros, es decir, el 28,9% del total.
Por su parte las importaciones crecieron un 11% hasta 6.108 millones y siguen acortando la diferencia de la balanza comercial. De hecho, la provincia de Valencia se encuentra con un saldo negativo en lo que llevamos de año de más de 500 millones de euros, ya que sus exportaciones caen un 4,4% en lo que va de año. también retroceden casi un 8% en Castellón, mientras que la buena noticia es que las alicantinas crecen un 14%.
El automóvil no levanta cabeza
Especialmente preocupante es la evolución en los grandes sectores industriales. El automóvil continúa su travesía por el desierto y los datos de los dos primeros meses muestran que la caída no es sólo cosa de Ford. En conjunto retrocede otro 24%, pero en el caso de los componentes y piezas la caída es de cerca del 45%. De suponer casi una cuarta parte de lo que vendía la Comunidad Valenciana hace unos años se ha pasado a representar el 10%.
Hoy ya es el quinto sector en el ranking valenciano exportador, por detrás de alimentación, semimanufacturas no químicas (que incluye el azulejo, que creció cerca de un 7%), bienes de equipo (con un retroceso del 8%) y química (pese a que cayó un 3%.
Por mercados, el mayor comprador valenciano, Francia redujo su volumen, al igual que la Unión Europea en general, con casi el 59% del total. En plena amenaza arancelaria de Trump las ventas a ese país acumulan un descenso del 6%, aunque las importaciones de ese mercado se desploman mucho más, un 21%.