
Hay coches que, aunque no se hayan probado -o siquiera visto de cerca- nunca, siempre ocuparán un lugar especial en el imaginario colectivo. Tal es el caso de los vehículos más característicos de la capital del mundo: los coches de policía y los taxis de Nueva York comenzarán pronto una nueva etapa, con la renovación de modelos en ambas flotas.
La decisión de Ford de jubilar su mítico Crown Victoria, el turismo de tamaño completo del gigante de Detroit, ha afectado decisivamente al futuro de los coches de policías y taxis de la Gran Manzana, siempre protagonistas de infinidad de series y películas.
Pero ambos vehículos cuentan ya con un sustituto que, en la recogida del testigo, prometen intentar rendir, por lo menos, al mismo nivel al que lo han hecho ellos durante las últimas tres décadas.
Un coche específico para patrullar
El cuerpo de policía ya ha encontrado su relevo natural al Crown Victoria en otro modelo que Ford ha desarrollado especialmente para la patrulla de las calles estadounidenses, el Ford Police Interceptor, que estará disponible en cinco versiones: dos basadas en la berlina Taurus y tres con el SUV Explorer como estructura base.
Aunque todavía no se ha consumado el relevo, las pruebas del Police Interceptor ya han comenzado y, una vez esté implantado en las calles de Nueva York, la policía llegará a ahorrarse hasta un 20% en el consumo de combustible con respecto al Crown Victoria. Quienes han podido sentarse al volante del nuevo modelo lo han acogido ya con muy buenas sensaciones, por lo que se puede prever que pronto el Police Interceptor estará circulando en las calles de Manhattan.
Más espacio y confort para los turistas en el taxi
Menos natural, más chocante, resulta el sustituto oficial de los ya antiguos taxis neoyorquinos. A finales de la semana pasada, Nissan confirmaba que había llegado a un acuerdo con el ayuntamiento de Nueva York por el cual la 'flota amarilla' se completará, a partir de 2013 y durante los próximos diez años, con su NV200.
Se trata de un monovolumen con espacio para cuatro pasajeros -además del conductor-, amplia capacidad de carga, fácil acceso mediante puertas correderas y un techo solar que permitirá, sobre todo a los turistas, disfrutar de las luces y los rascacielos de la ciudad que nunca duerme.
Pero lo que más llama la atención, al menos a priori, es que desde la ciudad de Nueva York se haya decidido incorporar masivamente a sus calles un coche japonés y dejar de lado a los Ford, siempre guardianes de la esencia del automovilismo estadounidense.
Sin embargo, la elección de un coche foráneo como taxi oficial es coherente con esa tendencia creciente en la demanda norteamericana a decantarse por otro tipo de coches -europeos y japoneses, sobre todo- que responden mejor a las nuevas necesidades de la sociedad actual (pequeños de fácil manejo en la gran ciudad, más limpios y económicos...) y a la que, con éxito desigual, están tratando de adaptarse los fabricantes locales.
La evolución de las calles de Nueva York... y de sus visitantes
Con todo esto, el reconocido paisaje de la Gran Manzana empezará a cambiar muy pronto en sus carreteras. Tanto que, probablemente, a los más románticos y nostálgicos les suponga algo de tristeza que el Crown Victoria vaya desapareciendo progresivamente a partir del próximo año.
Pero conforme pase el tiempo, a buen seguro, el audiovisual procedente de EEUU cambiará nuestro imaginario hasta que los Police Interceptor y NV200 pasen a instalarse en la memoria colectiva como esos míticos vehículos que, durante los últimos años, han acaparado los Crown Victoria neoyorquinos.