Ya conocíamos las otras variantes de la nueva generación del Audi A5. Quedaba por ver cómo sería el modelo estrella, el que todo el mundo querría tener en su garaje. Sí, nos referimos al Cabrio, que promete sensaciones inimaginables bajo su techo de lona, tanto sus versiones normales como en la deportiva S5.
El nuevo A5 descapotable ya está aquí y, aunque pueda resultar parecido a su predecesor a simple vista -que lo es, no lo negaremos-, en realidad esconde algunas novedades que lo hacen muy interesante. Para empezar, ese frontal con nuevo diseño de faros y nueva parrilla Singleframe (más plana y ancha) le dan una personalidad más marcada a la mirada del cabrio alemán. La línea de cintura ondulada, los pronunciados pasos de rueda, la iluminación LED o Matrix LED -opcional- y los intermitentes con luz dinámica hacen que el nuevo A5 tenga ese punto diferenciador.
Pero una vez más, al más puro estilo Audi, lo más sorprendente no está en el envoltorio sino dentro. Nos referimos, en primer lugar, al giro de diseño que ha recibido la zona de la consola central, el salpicadero y la instrumentación, que hacen de este Audi un coche más premium y más apetecible al tacto y la mirada. No sólo eso, también crece la habitabilidad con unas cotas mejoradas para anchura de hombros y espacio para las piernas. Nada menos que 26 y 18 milímetros respectivamente, cifras ambas que suponen un gran desahogo. Esto es algo realmente apreciable en un descapotable que, como muchos sabrán, suelen pecar de falta de espacio, sobre todo en la fila posterior.
Bajo la piel de los nuevos Audi A5 Cabrio y Audi S5 Cabrio encontramos una suspensión de cinco brazos en los dos ejes, una amortiguación adaptativa que el conductor puede manejar a su antojo con el Audi drive select y una nueva dirección electromecánica. Todo ello enfocado a ofrecer diversas experiencias de conducción, que van desde la más sedosa posible hasta otras muy dinámicas.
Todo esto no dejan de ser promesas de la propia marca, ya que el coche no lo podremos conducir hasta que salga al mercado el año que viene, pero a juzgar por la dinámica del coupé, que sí ha pasado ya por nuestras manos, no nos cabe duda de que el equilibrio entre confort y deportividad estará muy logrado. De ser así, el nuevo A5 Cabrio se convertiría en una buena alternativa para esos clientes que disfrutan de la conducción a cielo abierto por carreteras entretenidas, pero a la vez no están dispuestos a renunciar a un nivel alto de comodidad.
Hasta 354 CV bajo el pie derecho
La oferta mecánica inicial del nuevo A5 Cabrio está formada por tres motores, un gasolina y dos diésel. El primero es el 2.0 TFSI de 252 CV; los segundos son el 2.0 TDI de 190 CV y el 3.0 TDI de 218 CV. Más adelante la gama crecerá por arriba y por abajo con el 2.0 TFSI de 190 CV y el 3.0 TDI de 286 CV. En comparación con el modelo anterior, los motores ofrecen hasta un 17% más de potencia, a la vez que consumen un 22% menos. En el caso del Audi S5 Cabrio, el plato fuerte es precisamente su motor V6 turbo, que entrega 354 CV y 500 Nm, y se plantea como la herramienta perfecta para dar rienda suelta a las emociones al volante más puras.
En materia de transmisión, las opciones disponibles serán la caja manual de seis velocidades y las automáticas S tronic (doble embrague, siete marchas) y tipronic (convertidor de par, ocho marchas), en función de los motores. La tracción puede ser delantera o integral quattro en función del propulsor elegido.
Los nuevos Audi A5 y S5 Cabrio llegarán a los concesionarios en abril de 2017, justo coincidiendo con la primavera para que sus afortunados dueños puedan poner su melena al viento. Basta con pulsar un botón para, en una sola maniobra, quitar y poner el techo de lona. Tarda 15 y 18 segundos en realizar la operación de capotado/descapotado y, según afirman en Audi, la calidad y la acústica del material textil han dado un salto cualitativo. Los precios para España de los A5 y S5 Cabrio aún están por definir, aunque se sabe que en Alemania parten de los 49.350 y 67.800 euros, respectivamente.
