La firma japonesa Honda lanza al mercado un restyling de su coupé híbrido CR-Z, en el que la potencia máxima del sistema se eleva hasta los 137 CV, desde los 124 anteriores, sin que ello repercuta en la economía de combustible o el nivel de emisiones contaminantes del vehículo. Sale a la venta desde 21.800 euros.
El motor de gasolina de 1.5 litros del Honda CR-Z gana siete caballos de potencia hasta 121 CV, mientras que el propulsor eléctrico pasa de 14 a 20 CV. Además, la batería de níquel se ha sustituido por una de ión-litio, por primera vez disponible en este modelo. Dicho incremento de potencia no afecta al consumo, que se queda en 5 l/100 km ni a sus emisiones de CO2, de 116 g/km.
Además, el actualizado CR-Z incluye el sistema Sport Plus (S+), que mediante el accionamiento de un botón en el volante permite incrementar la aceleración del vehículo durante diez segundos por medio de un impulso eléctrico, siempre que el nivel de carga de la batería sea superior al 50%.
Más sutiles son las novedades en su diseño, tanto por dentro como por fuera. La gama se estructura en tres niveles de acabado (Sport, GT y GT Plus), pero de serie el Honda Cr-Z llega equipado con elementos como llantas de aleación de 16 pulgadas, control de estabilidad y tracción, sensor de lluvia, retrovisores exteriores eléctricos, control de crucero, luces diurnas LED o climatizador.
El nuevo Hoda CR-Z, disponible en los concesionarios desde este mes de marzo, parte de los 21.800 euros que cuesta con el acabado Sport, precio que puede elevarse hasta los 26.800 euros del acabado GT Plus, teniendo en cuenta ya las ayudas estatales a la compra de vehículos eficientes del plan PIVE.
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