El fabricante estadounidense de vehículos eléctricos Tesla fabricó un total de 83.922 vehículos durante el conjunto del año pasado en todo el mundo, lo que representa una progresión del 64% en comparación con el ejercicio anterior, según datos publicados por la empresa. No obstante, solo entregó 76.230 unidades y no alcanzó su objetivo de sumar un total de 80.000 en 2016. Además continúa muy lejos de las 500.000 unidades que prevé fabricar en 2018.
El volumen de producción de la compañía durante el último trimestre del año fue de 24.882 unidades, mientras que su cifra de ventas en el último cuarto del año se situó en 22.200 unidades. De este total, 12.700 unidades fueron del Model S y las 9.500 unidades restantes, del Model X.
Sin embargo, la firma con sede en Palo Alto no logró cumplir con su objetivo de alcanzar las 80.000 entregas en 2016 tras materializar un total de 76.230. Unas pretensiones que parecían factibles cuando cerró el tercer trimestre en positivo por primera vez en su historia -la empresa se fundó en 2003-.
La firma indicó que las ventas del último trimestre fueron conservadoras puesto que únicamente cuentan como venta cuando el vehículo ha sido transferido al cliente y todos los papeles están en orden, un proceso que se vio alterado por el retraso en la producción causado por la actualización del hardware usado por la compañía para ofrecer el denominado 'AutoPilot 2.0' en sus últimos vehículos fabricados.
Los Tesla más recientes carecían de algunas características de este sistema que sí que incluían los más antiguos puesto que estaban esperando dicha modificación. De esta forma, ya cuentan con más cámaras y un ordenador de a bordo más potente para procesar los datos de navegación.
La entidad añadió que, "además de las entregas del 4T, alrededor de 6,450 vehículos se encuentran en tránsito y serán contabilizados en las entregas del 1T de 2017".
Tesla indicó que al cierre del año lograron cumplir con sus objetivos industriales, aunque esta situación tuvo un impacto sobre las producción. La corporación que dirige Elon Musk señaló que las cifras de ventas únicamente representan una medida de la evolución financiera de la empresa, por lo que subrayó que no se deben tomar como un indicador de sus resultados económicos globales, sobre los que influyen otros factores como los costes, el tipo de cambio de divisas o el 'mix' de ventas.
