
El proyecto de construcción del futuro Túnel Internacional Paso de Agua Negra, diseñado para unir Chile y Argentina por la Cordillera de los Andes, ha echado a andar. La sociedad creada por ambos países para gestionar la licitación de la obra, Ebitan, ha cerrado el periodo para la recepción de las muestras de interés y entre las 23 empresas que han presentado sus credenciales se encuentran seis firmas españolas. Se trata de FCC, ACS (tanto Dragados como Hochtief acuden a la cita por separado), Acciona, Copasa (en consorcio con ICA y Graña) y OHL.
Por la licitación del proyecto, valorado en 1.000 millones de euros (1.250 millones de dólares) según las últimas estimaciones, también se han interesado empresas de China, Corea, Brasil o Italia. Según el calendario previsto, el siguiente paso será la constitución de una comisión integrada por representantes chilenos y argentinos para calificar a las empresas. Este proceso se extenderá hasta fin de año y se espera que a principios del 2014 se comiencen a estudiar las ofertas técnicas y económicas. El objetivo es adjudicar el proyecto a lo largo del año que viene.
La construcción de esta importante infraestructura, la cual ha logrado poner de acuerdo a los Gobiernos de Chile y Argentina, muy separados ideológicamente desde hace algunos años, se ha convertido en un proyecto recurrente desde hace décadas sin que nunca antes se haya llegado a lanzar un proceso de licitación.
Conexión portuaria
El Túnel de Agua Negra comunicará la ciudad chilena de Coquimbo, con una importante actividad portuaria, con la ciudad de San Juan en Argentina, facilitando enormemente el tráfico de mercancías entre ambos países. En este sentido, Brasil también se beneficiará de esta infraestructura, ya que la carretera afectada llega hasta la ciudad de Porto Alegre, la cual cuenta también con uno de los puertos más importantes del Atlántico Sur.
Sobre las características técnicas del proyecto, la empresa adjudicataria tendrá que construir un total de 45 kilómetros de vía subterránea. Casi 14 kilómetros corresponden al trazado normal de dos túneles, uno para cada sentido de la marcha, además de a los 28 túneles que conectarán los dos principales a lo largo de todo el recorrido. La entrada por el lado argentino estará a 4.000 metros de altitud y 3.750 metros por el lado chileno.
Sergio Uñac, vicegobernador de la provincia de San Juan, destacó a varios medios argentinos hace unas semanas que en el presupuesto nacional de Argentina "están garantizados los recursos para la construcción del túnel. Eso no sería un impedimento para poderlo concretar, porque si ya ha habido una expresión, un tratado de Maipú, el gobierno argentino hará este esfuerzo en cualquier caso".