
El mercado de la vivienda en España continúa en caída libre. Las compraventa se está desplomando por encima del 26% interanual , mientras que los precios de los inmuebles están cayendo más de un 12%, unos de los ritmos más elevados de la Unión Europea.
A pesar de estos datos desoladores, el precio de la vivienda no ha tocado fondo. En España, el precio de los inmuebles comenzó a caer en picado mucho más tarde que en otros países con similares problemas, como es el caso de Irlanda, donde el precio de la vivienda, según Eurostat, caía a un ritmo del 12,9% interanual en 2009, mientras que en España lo hacía al 5,7%.
Tal y como explica el Catedrático de Economía de la Universidad Pompeu Fabra, José García Montalvo, en La Vanguardia "en España se usó la táctica de extender y pretender aplicada por los bancos españoles", una estrategia para evitar que salieran a la luz los tremendos agujeros en los balances de las entidades financieras. Como consecuencia, la vivienda tardará en alcanzar su valor real más tiempo que en países como Irlanda.
García Montalvo explica que "los últimos cálculos del stock de viviendas nuevas por vender muestran que no se ha producido una reducción significativa y siguen en torno a las 800.000 viviendas desde 2010", subraya el Catedrático.
Además, "la vivienda sigue estando cara en términos de los recursos disponibles por las familias. El indicador de años de renta familiar disponible necesarios para comprar una vivienda media sigue bastante por encima de la media histórica, y la tasa de desempleo sigue a niveles estratosféricos. Esto significa que los precios seguirán cayendo y la demanda local tiene pocos visos de poder empujar en el mercado", explica García Montalvo.
Para concluir, el Catedrático de la Universidad Pompeu Fabra asegura que "el mercado inmobiliario sigue en la UCI con respiración asistida y todavía no está para pasar a planta". Los precios de la vivienda seguirán cayendo en España, para que se estabilicen la demanda tendrá que igualar a la oferta, y mientras el stock de vivienda siga siendo tan elevado, o se incrementa mucho la demanda o aún quedarán años de descensos en los precios de los inmuebles.