El presidente de Sacyr Vallehermoso, Luis del Rivero, ha sindicado su participación en el grupo con la del ex presidente José Manuel Loureda y otro tercer accionista, de forma que en conjunto controlarán el 26,95% del capital social de la compañía de construcción y servicios.
En virtud del acuerdo, remitido a la Comisión nacional del Mercado de Valores (CNMV), y que se firma con una vigencia de un año con posibilidad de prorroga, los tres socios se comprometen a votar en el mismo sentido en Sacyr.
Los tres socios suscriben este pacto después de que trascendieran distintas discrepancias en el seno del consejo de administración de Sacyr. También tiene lugar después de que el propio grupo de construcción sindicara con la firma mexicana Pemex su participación en Repsol, donde suman un 29,5%.
En este acuerdo, el presidente, Luis del Rivero, suma el apoyo expreso de la familia fundadora Loureda y de otro directivo aunque queda fuera de la sindicación el consejero delegado, Manuel Manrique, que, con su participación directa de un seis por ciento, hasta ahora ha estado alineado con las tesis del presidente.
No obstante, la postura de Manrique sigue siendo una incógnita, dado que, de haberse sumado al pacto habría obligado al grupo de socios a lanzar una opa, puesto que habrían superado el límite del 30 por ciento que marca la ley para lanzar una oferta por el 100 por ciento del capital.
"Con el pacto el enfrentamiento entre los dos grupos de accionistas de Sacyr se hace patente. El movimiento parece que tiene dos motivaciones: aflorar la participación de Javier Gayo (el tercero de los socios, que posee un 1,71% del capital) y gracias a esto quizás intentar nombrar otro consejero", dijo un analista que pidió el anonimato.
Recientemente y por sorpresa, uno de los representantes de NovaCaixaGalicia presentó su dimisión como consejero dejando vacante un puesto en el órgano. Sacyr tiene actualmente 18 consejeros, a la espera de lo que se decida sobre la vacante dejada por el representante de NovaCaixaGalicia.
Los problemas internos
El anuncio de sindicación se produjo horas antes de la celebración de un nuevo consejo de administración de la constructora al filo del mediodía, con su órgano de decisión frontalmente dividido, incluso con enfrentamientos en los tribunales, por derechos de voto de accionistas no afines a la gestión de Rivero que suman en torno a otro 26%.
El acuerdo de sindicación firmado recientemente con Pemex para unir estrategias en Repsol, en la que la constructora controla un 20% del capital, ha sido otro foco de fuerte tensión en el consejo de la constructora y en el de la petrolera, que se defiende del intento de aumento de poder de Sacyr.
Además de los consejeros ahora unidos en pacto de accionistas, hay otras sindicaciones en el órgano de Sacyr, como las de las cajas de ahorros Bankia, Unicaja, Caja Murcia (integrada en BMN) y NovaCaixaGalicia, que agrupan en un único voto un 12,28 por ciento de capital. Además, la caja gallega tiene otro 2,27 por ciento.
Por otra parte, con el voto unido de alrededor de otro 26% del capital, se agrupan los accionistas claramente contrarios a la gestión de Rivero liderados por los empresarios Demetrio Carceller y Juan Abelló.
En la última y tensa reunión del consejo de Repsol, en la que se pidió formalmente a Pemex y Sacyr que rompieran su pacto, Abelló, uno de los tres representantes de Sacyr en el consejo de la petrolera, mostró su disconformidad con la estrategia de la constructora y abandonó la reunión.
La lucha en el poder de la constructora se ha trasladado también a los tribunales, al presentar el grupo liderado por Carceller y Abelló una demanda de impugnación contra algunos puntos de la última junta de accionistas de la constructora en la que se aprobó dar un nuevo consejero a Del Rivero y otro a Manrique en calidad de dominicales sin que estos hubieran incrementado su participación en la sociedad.