La victoria de CiU en Barcelona es, más allá del final de 32 años de gobiernos socialistas, es un durísimo golpe al PSC quetendrá que aprender a hacer política sin el control de la gran urbe catalana.
El salto que este 22 de mayo ha dado CiU en Barcelona -de los 12 a los 15 escaños- no por anunciado ha sido menos doloroso para el PSC. Jordi Hereu ha caído de los 14 a los 11 escaños, cosechando el peor resultado de la historia para el PSC y abriendo las puertas a unas "duras decisiones" auguradas ya para los próximos meses por el ex 'president' José Montilla. La victoria de Xavier Trias inaugura una etapa de atrofia política nunca antes conocida por un PSC que en menos de un año ha pasado de tenerlo todo a no tener nada.
Barcelona -en la que la participación ha crecido tres puntos, hasta el 53%- es, además, el paradigma de una jornada negra para los socialistas, quienes también han perdido Girona en favor de CiU. Sólo los pactos dirán si el mismo camino sigue Tarragona.