
La pérdida de la competitividad del bioetanol nacional por la previsible supresión de la exención del impuesto especial sobre hidrocarburos por parte del Gobierno central a final de este año "firma" la primera regulación de empleo en la planta de Babilafuente.
Representantes de la empresa Abengoa presentarán este miércoles a los trabajadores un expediente de regulación de empleo que afectará a la cuarta parte de la plantilla, según publica en su edición e hoy La Gaceta Regional de Salamanca. Desde la empresa argumentaron que la escasa venta de bioetanol para la mezcla con gasolina en territorio nacional obliga a exportar con elevados costes, lo que conduce a la fábrica a cerrar con pérdidas.
La noticia del expediente de regulación y la negativa de la empresa a dar garantías de continuidad al resto de los 82 empleados ha sorprendido a los trabajadores porque Abengoa acaba de invertir en la sustitución de tres calderas de la fábrica, cuyas averías obligaron a detener la producción a principios de este año; también la empresa trabaja en la ampliación de la planta de biomasa con una inversión de Biocarburantes de Castilla y León -filial de Abengoa - de seis millones de euros para que comience a funcionar en mayo y, además, ha anunciado la apertura de un laboratorio de investigación y desarrollo del grupo junto a la fábrica.