
En la reunión mantenida hoy entre los representantes sindicales y de la empresa no se ha llegado a un acuerdo en el convenio colectivo para el que la dirección de Opel España había fijado hoy como el día límite para consensuarlo. El resultado de este encuentro será comunicado a PSA, que deberá decidir ahora qué pasos se siguen o los posibles ajustes. Desde los sindicatos se mantiene la voluntad negociadora y se lamenta que no se hayan aceptado sus propuestas planteadas en la comisión negociadora.
El 15 de diciembre estaba fijado en el calendario de Opel España como el último día para llegar a un acuerdo en la negociación del convenio colectivo, el primero que se negocia tras la compra de PSA.
Inicialmente, el acuerdo se veía difícil por la diferencia de posturas entre la empresa y los sindicatos, que no veían con buenos ojos la rebaja salarial del 6% el primer año de convenio y la congelación del sueldo en los cuatro años siguientes ni tampoco otras medidas que se planteaban como las condiciones del sistema de turnos propuesto para abordar la carga de trabajo en la Línea 1 de la planta de Figueruelas, entre otras.
Dos posturas que hoy han seguido sin acercarse dentro de esta reunión que ha sido "tensa", a pesar de que los sindicatos, tal y como les pidió la empresa en la anterior reunión mantenida el pasado miércoles, han presentado diferentes propuestas, que han sido rechazadas por la compañía, que incide en que se está poniendo en juego el futuro de Opel España, que pasa por acometer recortes.
Esta falta de acuerdo será ahora comunicada a la dirección de PSA -puesto que no se ha prorrogado explícitamente el período de negociación-, que tendrá que valorar esta situación y determinar los pasos que se van a dar o bien plantear los ajustes en los que ha incidido desde la compra del negocio europeo de Opel y en la presentación del plan PACE! en el que ya se apuntó la necesidad de reducir costes en la producción de vehículos -una media de 700 por coche-, entre otras medidas, para abandonar los números rojos de Opel. Unos recortes de los que Figueruelas se había salvado, siendo la única planta en la que todavía no se habían aplicado las medidas económicas.
Desde los sindicatos UGT y CCOO se ha lamentado que no se hayan aceptado las propuestas que han planteado en la reunión de hoy de la comisión negociadora y que permitían poner solución a la situación actual y afrontar la carga de trabajo para el año 2018.
En concreto, desde UGT se ha propuesto un convenio a cinco años, pero condicionado "a que las dos líneas de producción estén llenas de producto". En caso contrario, se anularía. Además, el sindicato ha mostrado la disponibilidad a que la flexibilidad que tienen pactada se adapte a las necesidades de producción para trabajar viernes noche y sábados por la mañana y, si fuera necesario, el sábado por la tarde, según han indicado a elEconomista.es
La propuesta de este sindicato también incluye el condicionante de que "a la vuelta de las vacaciones haya una doble plantilla para los fines de semana". Y, mientras se produce esa situación, se ha indicado que se podría dar prioridad a los trabajadores que deben jornada. Su propuesta igualmente recoge que las horas generadas en esas jornadas se disfruten el mes siguiente con una compensación del 1 x 1,25. Además, se ha mostrado la disposición a la contención de costes laborales, pero sin especificar cifras concretas.
Desde el sindicato CCOO, en declaraciones a elEconomista.es, también se ha dado a conocer una propuesta alternativa al planteamiento de la empresa, que la propia organización sindical ha definido como "atrevida. Nuestra propuesta era de futuro y de presente" con la que "se soluciona el problema de la producción con un sistema temporal", aunque de continuar se debería "tener una doble plantilla para los fines de semana" tal y como está recogida en otros convenios.
"Nuestra propuesta es un gran esfuerzo y también en contención salarial que estaríamos dispuestos a hablar, pero no en el resto de los puntos porque entendemos que no son necesarios", añaden desde CCOO.
Tanto desde UGT como desde CCOO en Opel continúan manifestado su disposición a negociar y a poder llegar a acuerdos y explorar "otras posibilidades". Desde la empresa tampoco se descarta volver a mantener encuentros, aunque sigue manteniendo su propuesta inicial en la que dejan la puerta abierta a rebajar el 6% de reducción salarial.