El Informe Funcas prevé que el PIB de Aragón crezca el 3,1% este año, mientras que para 2017 se observa una cierta ralentización de la economía con la que el crecimiento económico se situará en torno al 2,5%. Un porcentaje este último que, sin embargo, se situará por encima de la media española. El sector servicios y la industria serán las principales causas de esa desaceleración.
El Informe Funcas de "Previsiones económicas para las comunidades autónomas 2016-2017" refleja buenas perspectivas para la comunidad aragonesa tanto para finales de este ejercicio como para el próximo año.
En concreto, las previsiones apuntadas contemplan un crecimiento del PIB de Aragón del 3,1% para este año y del 2,5% para 2017, porcentaje que pese a indicar una cierta desaceleración económica en la comunidad, permitirá que Aragón crezca por encima de la media española, superando ese ratio en tres décimas.
Entre los principales factores que explican esa desaceleración de la economía aragonesa para 2017 se encuentra la pérdida de impulso tanto de la industria como de los servicios, tendencia que se observa también en la mayoría de las comunidades autónomas.
No obstante, se prevé que su aportación siga siendo importante para la economía aragonesa dentro de un contexto en el que comenzará a recuperarse la construcción.
Un sector que "comienza a acelerar su crecimiento y que podría situarse por encima del sector servicios", según ha explicado el director general de Funcas, Carlos Ocaña, en la presentación del informe.
Las previsiones en cuanto a datos del paro también son positivas tanto para este año como para 2017. Según los datos del informe, la tasa de paro se reducirá hasta el 14,2% este año y bajará hasta el 13,2% este año, siendo Aragón una de las autonomías -junto con Baleares, Navarra, País Vasco La Rioja-, en la que este indicador se situará por debajo del 15%.
Además, se seguirá produciendo un aumento del PIB per cápita, que continuará creciendo por encima de la media en ambos ejercicios como consecuencia de una mayor tasa de crecimiento que la media en 2017 y por la evolución negativa de la demografía en la comunidad aragonesa.
Unos ratios que permiten afirmar que "el crecimiento llega a Aragón de manera importante. En un año y medio no se prevén cambios en la tendencia que ya se observaba en 2015", ejercicio que fue el primero de crecimiento tras los años de crisis con un 2,7%.
Es significativo además que el crecimiento se "debe a la colaboración de varios sectores porque, afortunadamente, la economía aragonesa no es un monocultivo", además de responder a indicadores como el índice de producción industrial, que está en niveles positivos, y al mayor dinamismo en el empleo.
"Aragón tiene una estructura económica equilibrada y no sufre los vaivenes de la economía española" con la misma intensidad como ha podido suceder en sectores como la construcción en la costa Mediterránea.
Dentro de los sectores de actividad, especial peso en la evolución económica han tenido los servicios y el turismo, con un importante aumento de las pernoctaciones (el mayor crecimiento de todas las autonomías), así como la construcción en la que se observa que la obra de edificación ha crecido en 2016 por los datos de visados, aunque se ha producido una acotación en la obra pública.