
Los profesores de Neuroanatomía de las facultades de Medicina saben de la complejidad del cerebro. De hecho, a modo de reflexión, suelen decir a sus alumnos que éste es el único órgano del ser humano que se estudia a sí mismo. Una asociación de ideas contundente que evidencia la dificultad del mismo. La neuropediatra María José Mas sabe de esta complicación y ha publicado el libro La aventura de tu cerebro. El neurodesarrollo: de la célula al adulto para ayudar a padres y docentes a entender mejor el comportamiento de la infancia y adolescencia.
La principal razón que evita que el órgano principal del sistema nervioso sea tan desconocido es porque todavía no se ha perfeccionado la forma de acceder a él sin dañarlo. "Es muy difícil acceder a su conocimiento sin lesionar, podemos conocer bien la anatomía del cerebro gracias a los estudios post mortem", explica la neuropediatra y autora de este libro.
Mientras ese conocimiento sigue su curso, la mejor forma de asegurar una buena salud y desarrollo del cerebro es cumplir algunos de los consejos que María José Mas propone en su libro. La médico explica que a pesar de que nuestro desarrollo esté dominado por la herencia, esa herencia se puede modificar según el ambiente: "Nosotros como adultos podemos asegurar que tenga un mejor desarrollo", sentencia.
En esta tarea, la rutina es una de las claves que favorece un buen crecimiento. "Lo que ayuda es un ambiente rico en estímulos pero ordenados. La sorpresa sin más y continua no permite hacer un aprendizaje, porque este se produce por repetición. Los estímulos deben ser variados y ricos pero que se repitan", explica María José Mas.
La experta también apunta que una buena alimentación es fundamental y sobre el uso de pantallas por parte de las nuevas generaciones no es algo que deba preocupar en exceso.