
El Estado de Washington tiene la sede central de Microsoft y una de las principales sedes de Google en su capital Seattle. Sin embargo, el nivel gastronómico, tanto en su vertiente culinaria como en el servicio, no está a la altura por lo cual han elaborado un plan para dar la vuelta a la situación en un plazo de 20 años.
Uno de los pilares será la Universidad pública Central Washington Univerity, encargada de generar y atraer talento para formar gestores y cocineros capaces de elevar el nivel de los restaurantes del Estado de la costa del Pacífico. Para ello, se dedicaron a buscar experiencias que les pudiesen servir de Know-How y se decantaron por la ciudad de Sevilla que en 25 años ha sabido dar la vuelta a su oferta culinaria gracias, en parte, a la labor de la Escuela de Hostelería de Sevilla perteneciente al grupo de restauración Lezama.
Pedro Oliver, director de la Escuela sevillana, explica que hace 3 años la universidad estadounidense se puso en contacto con ellos para poder exportar el programa formativo que imparten en Sevilla. "No solo pretenden formar buenos gestores de restauración y buenos cocineros, también buscan el servicio que se imparte en los restaurantes sevillanos". De hecho, el grupo Lezama cuenta con un restaurante en Washington DC y estuvieron durante 12 años en Seatlte, lo que les permitió ser conocidos en la ciudad.
Fruto de estos tres años de conversaciones, que todavía siguen en marcha, la Escuela de Hostelería de Sevilla ha cerrado un acuerdo con Central Washington Univerity para impartir un titulo internacional, en inglés, entre los dos campus. Aunque están adaptando el actual programa de Sevilla a las peculiaridades de Washington, la base es la misma con una alto componente de cocina española aunque también internacional.
La universidad estadounidense busca sumar a su portfolio un curso de turismo, hospitalidad, hostelería y gastronomía del que carecen, pero también utilizar Sevilla como un atractivo para atraer alumnos no estadounidenses, especialmente asiáticos -coreanos y japoneses-. El curso compartido les permitirá que sus estudiantes estudien al menos un año en España, aunque es flexible y pueden ser dos o tres, un atractivo para los asiáticos.
Para los alumnos del campus sevillanos, un 80 por ciento españoles, les aporta la posibilidad de mantener una experiencia en el extranjero, reforzar su inglés y abrirse a nuevos mercados. No obstante, la Escuela de Hostelería mantiene su curso en español, aunque se permitirá a los alumnos que pasen un periodo de hasta 6 meses en el campus de Washington.
El programa se pondrá en marcha en el curso 2020-2021, aunque para el próximo se iniciará un intercambio de alumnos por parte de ambas universidades. De hecho, ya hay una veintena de alumnos que están en segundo interesados en pasar seis mese en Estados Unidos.