Parece que no es el mejor momento del sector de la moda de lujo. De esto, China tiene gran parte de la culpa. Los consumidores asiáticos siempre se han caracterizado por ser unos de los que más productos de lujo adquieren, pero en los últimos meses el sector está frenando bastante en estos países. Si a esto le sumamos que los países emergentes también han bajado el volumen de compras a las empresas de lujo, el desastre está garantizado.

Hermès, una de las multinacionales de moda de lujo más importantes del mundo, también nota los efectos devastadores de las caídas de las ventas. De hecho, los responsables de la firma francesa ya prevén que su crecimiento previsto para el 2016 no será del 8 %, tal y como habían fijado de objetivo. Al parecer, su volumen de crecimiento estará por debajo de esa cifra. Esto les ha obligado a actuar para evitar quedar por debajo de su máximo competidor, el conocido grupo de lujo LVMH.

La participación de Hermès en otras empresas

La forma en la que Hermès evita que los efectos de la caída de las ventas se noten exponencialmente es muy sencilla. La Maison echa toda la carne en el asador y adquiere participaciones minoritarias en las empresas propias de algunos de sus diseñadores de cabecera. Ya lo hicieron en el año 2003, cuando compraron el 30 % de la Jean Paul Gaultier, quien era su director creativo en aquel momento.

Ahora, Hermès, ha hecho público el anuncio de la adquisición de un pequeño porcentaje de la firma de Pierre Hardy, uno de sus diseñadores freelance. De esta forma la casa consigue aumentar la confianza que deposita en sus creativos, a la par que incrementan beneficios.

Pierre Hardy acaba de inaugurar su tienda en Tokio, que se suma a las flagships que la firma de complementos ya tenía en Nueva York y en París. Además, es posible adquirir piezas de este diseñador a través de diferentes córners en las mejores tiendas multimarca del mundo.

En pocos meses podremos comprobar si otro año consecutivo, Hermès ha acertado con sus estrategias para posicionarse por delante de su mayor competidor.