
El arquitecto italiano Piero Lissoni ha ganado un concurso especulativo de arquitectura -el Arch Out Loud- con Aquatrium, un futurista acuario sumergido en el río Hudson de Nueva York con icebergs, burbujas gigantes y tiburones.
Este trabajo proyecta una isla artificial en medio del río neoyorquino con dos niveles, uno de ellos sumergido bajo el agua. Una rampa diseñada como una concha marina comunicaría las dos plantas.
"La idea principal es generar un entorno en el que los visitantes sientan que ellos mismos están entrando en el agua para descubrir la belleza de la vida marina" fue uno de los argumentos que esgrimió Piero Lissoni para defender su proyecto.
La planta de la superficie y el vestíbulo de entrada se constituyen como una bella plaza con burbujas de agua que simbolizan diferentes ecosistemas marinos.
Los océanos Atlántico, Pacífico, Índico y los mares del Caribe, Mediterráneo, Tasmania y Rojo serán los ambientes marinos que estén representados en estas burbujas. Los océanos ártico y antártico y los polos estarán identificados por un gran iceberg en el centro de las burbujas.
Además, esta planta superficial tiene proyectado un techo corredizo que cubriría todo el espacio "como una concha que protege una perla" para crear un planetario.
La parte más tradicional de este acuario estaría en el nivel sumergido con los habituales tanques de agua para las diferentes especies marinas del acuario.