
La piel es nuestra mejor o peor aliada. La que estará con nosotros toda la vida y, según la tratemos, así responderá. Pese a esto, se nos olvida que "la piel tiene memoria", y debemos cuidarla porque es el órgano más grande de nuestro cuerpo.
Sobre todo esto habla Tania Mesa, directora de la Unidad de Nutrición y Enfermería de Neolife, la clínica de medicina preventiva antiagning. La especialista explica que, puesto que la piel se renueva constantemente, requiere un aporte continuado de nutrientes y agua a través de la comida. "Una alimentación desequilibrada y una mala hidratación pueden ocasionar alteraciones de su apariencia y crecimiento, con las consecuencias que ello conlleva, con la aparición de arrugas, irritación, celulitis, etc.", aclara Mesa.

En este sentido, la especialista detalla que, junto con los riñones, el hígado, los pulmones y los intestinos, la piel es uno de los encargados de limpiar el organismo y, por esta razón, "hay que evitar los tóxicos que puedan sobrecargar los órganos de limpieza".
En verano, la exposición solar es mucho mayor que el resto del año. Por ello, además de evitarla durante las horas más cálidas del día, usar protección solar e hidratarnos, es imprescindible consumir alimentos ricos en agua y en antioxidantes, como las frutas, verduras, pescados y aceite de oliva, los cuales pueden combatir el estrés oxidativo. "Todos los alimentos de origen vegetal, como las frutas, las verduras y las hortalizas, así como los frutos secos, aportan interesantes nutrientes para el cuidado de la piel, ya que son alimentos ricos en agua, fibra, minerales y vitaminas con carga antioxidante, como es la vitamina C", explica. Además, éstos favorecen la creación de colágeno, cuya función es dar al cuerpo soporte y forma. A esta lista, Mesa añade los pescados azules y el aguacate, pues también "aportan grasas saludables para la salud dermatológica".
Además, la directora de Nutrición nos habla de los eternos mitos. Esos que, muchas veces, causan grandes estragos y que son necesario aclarar. "Durante muchos años, se ha asociado la aparición de acné con el consumo de chocolate. Hay que diferenciar el chocolate puro, que tiene propiedades antioxidantes, con el ultraprocesado, que sí que provoca acné", explica. En este sentido, detalla que, para combatirlo, es recomendable tener una alimentación antiinflamatoria, y la cúrcuma, en este caso, es un ingrediente perfecto.
Para concluir, y teniendo en cuenta todo lo anteriormente comentado, Mesa explica la rutina de cuidados que tenemos que llevar a cabo para tener una piel saludable: "Debemos evitar una exposición solar prolongada usando protección solar adecuada durante las horas críticas del día, llevar siempre gorra o gafas de sol homologadas, evitar hábitos tóxicos, como el tabaco y el consumo de alcohol, evitar una exposición prolongada de contaminación ambiental, así como llevar un estilo de vida inadecuado. El estrés crónico, una actividad física insuficiente, pocas horas de sueño y descanso y en definitiva una alimentación tóxica, rica en sal, azúcares, harinas refinadas, productos procesados y baja en fibra, son suficientes para una inadecuada salud general y, en particular, para la piel", concluye la especialista. Y es que, nuestra piel es reflejo de nuestra salud, y no hay nada más importante.