En las próximas semanas se inicia la comercialización en España de la versión 2.0 TDI e del Audi A4, la variante más eficiente no sólo de la gama A4, sino también de las berlinas medias que existen en el mercado. Está equipado con el conocido motor 2.0 turbodiésel con filtro de partículas, un propulsor que desarrolla 136 caballos de potencia y que va asociado en esta versión a una caja de cambios manual de seis velocidades.
Sus cifras de consumo también son sorprendentemente bajas: 4,6 litros por cada 100 kilómetros de media, al igual que sus emisiones de CO2 (119 g/km), que se mantienen por debajo de la barrera a partir de la cual se paga impuesto de matriculación. Su precio en la calle es de 30.500 euros.
En cambio, las prestaciones no se ven muy penalizadas y ahí están los datos homologados para demostrarlo: acelera de 0 a 100 km/h en 9,5 segundos y alcanza una velocidad máxima de 215 km/h.
Novedades incorporadas
Una de las novedades que contribuyen al incremento de la eficiencia en el 2.0 TDI e es la introducción del sistema start-stop, un mecanismo que detiene el motor cuando el coche se para, la palanca de cambios está en punto muerto y el conductor retira su pie del pedal del embrague. Una vez que volvemos a pisar este pedal, cuando el semáforo se pone verde, por ejemplo, el motor arranca automáticamente. Con ello se reduce el gasto de combustible en los recorridos urbanos, en torno a 0,2 litros, y se dejan de expulsar unos 5 gramos de CO2 a la atmósfera por cada 100 km realizados.
Otra de las novedades que benefician ese ahorro y que forma parte del equipamiento de serie del coche es el sistema de recuperación de energía, que almacena en la batería parte de la energía liberada en las frenadas y retenciones, para luego disponer de ella en las fases de aceleración, reduciendo de esa manera las solicitudes que se le hacen al alternador y, por tanto, consumiendo menos gasoil.
Neumáticos de baja resistencia a la rodadura, en medidas 205/60 R 16, ajustes en la gestión del motor y unos desarrollos finales de la caja de cambios alargados un 5% en cada marcha, forman también parte de esos pequeños retoques que por sí mismos aportan una mínima cantidad en el ahorro total, pero que sumados todos ellos son los responsables de las cifras ya citadas.
Cambios en la aerodinámica
Obviamente, el trabajo efectuado en el campo de la aerodinámica también tiene su importancia. Se optimiza la forma de aquellos apéndices que pueden provocar más resistencia al viento, se reduce 20 milímetros la altura de la carrocería con el empleo de un chasis más deportivo, se cierra parcialmente la rejilla del radiador y se cubre lo más posible el fondo del vehículo para dejarlo más plano.
Un ordenador que nos orienta sobre la forma más eficiente de llevar el coche completa las mejoras. Mediante un análisis permanente del estilo de conducir y de las condiciones del terreno, el sistema va indicando a la persona sentada al volante cuándo conviene cambiar de marcha, para circular siempre en el punto óptimo de consumo.
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