
La Comisión Europea (CE) ha abierto un expediente para investigar el impuesto que varias comunidades autónomas están aplicando a la actividad comercial en las grandes superficies, al considerar que podría ser contrario al derecho comunitario.
Según anunció este miércoles el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, durante la clausura de la asamblea general de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), Bruselas ha contactado ya en este sentido con la Administración española para esclarecer si este impuesto supone un agravio frente a otros formatos comerciales, como los supermercados.
"Muy probablemente, este impuesto sea incompatible con el derecho comunitario", aseguró García-Legaz, al tiempo que insistía que "obviamente tendrá repercusiones y obligará a las comunidades autónomas que han puesto esos impuestos a cambiar el diseño".
De hecho, Anged ya había solicitado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que analizara la tasa ante el perjuicio que considera que supone para nuevas aperturas y el sector en su conjunto. El impuesto a las grandes superficies grava, en concreto, a los establecimientos de más de 2.500 metros cuadrados y está aprobado ya en Cataluña, Aragón, Asturias, La Rioja, Navarra y las Islas Canarias.
El 35% del beneficio
La patronal del gran comercio, que defiende los intereses de compañías como Carrefour, Alcampo, El Corte Inglés, Eroski, Ikea, Leroy Merlin o Cortefiel, Fnac y Media Markt, estima que el coste anual de este impuesto es de unos 200 millones de euros al año. "La tasa equivale aproximadamente al 35% del beneficio de cada establecimiento al año, convirtiéndose en estos últimos ejercicios en el principal gravamen del sector".
De acuerdo con los datos presentados ayer en la asamblea, la gran distribución encadenó en 2013 el sexto año consecutivo de caída de las ventas, con un descenso de la facturación del 2,9 %, hasta 37.260 millones de euros.
Durante su intervención en la asamblea de Anged, su presidente, Alfonso Merry del Val, se mostró sin embargo optimista y explicó ayer que, aunque aún no se puede hablar de un "gran repunte" del comercio, sí que se está produciendo "un cambio de tendencia que podría consolidarse en los próximos meses".
Según dijo, las mejoras macroeconómicas y la mayor confianza de los consumidores "está teniendo reflejo en las ventas del sector". Todo a pesar de que el INE ha reflejado un estancamiento, con una caída de las ventas del 0,2% en julio y el 0,9% en agosto; de que el Banco de España ha alertado también de un frenazo en el consumo y de que todas las demás patronales coinciden en que se está produciendo una caída de las ventas desde el pasado verano.
Inversión estancada
A la espera de que se confirme una u otra tendencia, la inversión del gran comercio está también estancada. En 2013 la cifra se elevó a 1.143 millones de euros, frente a los 1.173 millones de euros de un año antes. El gran comercio invierte, eso sí, el 43,3% del total del sector.
"Frente a un consumidor cada vez más libre, el comercio padece un intervencionismo político que resulta completamente inútil, salvo para aquellos que desean alimentar discursos ideológicos y enfrentamientos estériles, trasnochados y de espaldas a la realidad cotidiana", aseguró el miércoles el presidente de Anged en defensa de la libertad de horarios comerciales. Fue una postura respaldada también por el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz durante su intervención en la asamblea.