
El Catedrático de Estructura Económica de la Universidad Ramón Llull de Barcelona, Santiago Niño Becerra, sostiene que a pesar de la devaluación interna a la que se está sometiendo España, el único que empleo que se va a crear será temporal y a tiempo parcial. Las empresas evitarán crear empleo indefinido y a tiempo completo.
Niño Becerra señala que se está 'vendiendo' que "las bajadas salariales mejoran la competitividad, lo que hace que las empresas vayan bien y contraten más". Esta es la teoría.
Pero Becerra mantiene que "eso era cierto en el siglo XIX, y en la época del 'España va bien', pero no hoy: la demanda de trabajo ha dejado de ser función de los salarios e incluso de los costes laborales. La mejora de la competitividad se obtiene mejorando la productividad buena. Mientras que España aumenta la productividad despidiendo trabajo, y mejora su competitividad empeorando las condiciones de trabajo y subemplenado a sus trabajadores".
Es decir, la productividad crece ante la reducción de la ocupación. Como la productividad se obtiene de dividir producción entre ocupados, al caer estos últimos se incrementa el cociente de la división. Este crecimiento de la productividad en el argot económico se llama crecimiento de la productividad pasivo.
Becerra señala que "caerán más empresas que no son sostenibles, la Reforma Laboral se extenderá: caerán los salarios y las cotizaciones a la Seguridad Social de las empresas, pero el paro sólo caerá si desciende la población activa".
Con esta situación, Becerra cree que "el único empleo que tal vez aumente sea el contrato temporal a tiempo parcial. Dicen que va a suceder una cosa, pero pasa otra, y todo se fía a mañana: a un milagro imposible".