Con sus 400 caballos y una fulgurante aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora en unos nimios 3,7 segundos, el deportivo Trident Iceni se lanza a un mercado casi sin competencia, el de los cupés biplaza de altas prestaciones animados con un motor diésel.
Su motor quema el gasóleo en 8 cilindros dispuestos en V, sumando un cubicaje total de 6,6 litros. Lo sorprendente de este nuevo modelo es que, a pesar de sus apabullantes cifras de potencia y el monstruoso par motor de nada menos que 1.244 Nm, hay que leer dos veces la ficha técnica en su apartado de consumo.
Y es que el Iceni anuncia un gasto de combustible en ciclo mixto de ¡3,5 litros a los 100! La marca explica este brillante dato gracias a la gestión de una caja de cambios automática con relaciones finales muy desmultiplicadas y que aprovechan el generosísimo par motor para mantener un régimen de funcionamiento a muy bajas revoluciones rodando a velocidades de crucero. El Iceni sería capaz de recorrer 3.000 kilómetros sin repostar gracias a su insólita autonomía.
Preparación especial para circuito
No contentos con estos resultados, Trident ofrece a los más exigentes un Pack Performance con 30 caballos suplementarios y un kit aerodinámico que aumenta el efecto suelo de la carrocería. Y, por si no fuera suficiente, muestra en su catálogo el Pack Circuit que eleva la potencia hasta los 670 caballos, recurriendo a una caja de cambios y embrague adaptados al uso en competición amén de un equipo de frenos especiales para circuito.
Trident es una marca artesanal que construye coches deportivos en el condado británico de Norfolk y lanza su Iceni al mercado mundial con dos carrocerías, cupé y una versión al estilo shooting brake de Mercedes, por un precio de 117.000 euros. El paquete Performance se puede adquirir por 14.000 euros y el Circuit por 37.000 euros. Responsables de la marca inglesa ya habrían recibido un buen número de pedidos, para los que se ha establecido ya una lista de espera.