No dejes que tu vista te engañe, tras esa estética que pudiera parecer un tanto continuista se esconde un coche completamente diferente. El nuevo Audi TT, que aún está cocinándose a fuego lento en los hornos de la fábrica húngara de Gyor -saldrá a la venta después del verano-, se asienta sobre un esqueleto nuevo, adopta sistemas tecnológicos realmente interesantes y, aunque cueste creerlo, al verlo en vivo no parece tan similar al TT que aún está vigente.
En Ecomotor.es hemos tenido el privilegio de poder verlo y tocarlo -que no conducirlo- antes de su llegada a las cadenas de producción y lo cierto es que nos ha dejado un sabor de boca muy bueno. El pequeño coupé de los cuatro aros promete y mucho.
¿Qué hay de nuevo?
El Audi TT 2014 toma prestada la plataforma MQB para convertirla en su espina dorsal. Pero a diferencia de un A3, un VW Golf o un Seat León, esta estructura tiene más componentes propios, sólo presentes en el TT. El resultado es un armazón con mucho aluminio, más ligero y resistente a la torsión -hasta un 25 %- y con una distancia entre ejes más corta. También baja el centro de gravedad y aumenta la seguridad en caso de colisión, según nos cuentan los ingenieros implicados en el desarrollo del coche. Queda claro, entonces, que hay un salto cualitativo en todo lo que tiene que ver con el chasis.
Volviendo al tema estético que comentábamos en las primeras líneas, la idea de sus creadores era seguir la misma lógica de diseño que en el primer TT de 1998, pero estableciendo algunas diferencias.
Así, el nuevo modelo recuerda a sus antepasados por ciertos elementos como la caída del techo en su parte posterior o esos hombros tan característicos que se materializan en unos pasos de rueda delanteros muy marcados, pero al mismo tiempo se diferencia por sus faros y pilotos o por otros detalles como las taloneras, la parrilla singleframe o la zaga, visualmente dividida en dos secciones, separadas por la luz de freno que ocupa todo el ancho de la carrocería.
Revolución en el interior
Pero si en el exterior hay ciertas similitudes entre el nuevo Audi y sus antecesores, no se puede decir lo mismo del interior. Es aquí donde está la verdadera revolución de diseño. Cuando uno accede al habitáculo lo primero que percibe es una sensación de limpieza y simplicidad totales. En el nuevo TT no hay nada barroco -no lo ha habido nunca en realidad, pero ahora menos-. Los mandos que quedan visibles son los justos y necesarios, de tal manera que en la consola desaparecen la pantalla del navegador y del sistema de entretenimiento o incluso los controles del climatizador.
¿Y dónde han ido a parar? La primera ahora se encuentra en el cuadro de relojes, que es otra de las grandes novedades del coche y de la que hablaremos más adelante; los segundos, gracias al ingenio de los ingenieros -valga la redundancia-, están camuflados en los propios difusores de aire. Esto último no sólo parece una solución inteligente sino que además queda realmente bien desde un punto de vista estético. Observar esas pequeñas pantallitas con la información de la temperatura en pleno centro de las salidas de aire es un gustazo para la vista.
La pantalla de la instrumentación merece mención aparte. El nuevo TT renuncia a los relojes tradicionales para colocar en su lugar una pantalla de dimensiones generosas en la que aparecen proyectados el cuentavueltas y el velocímetro, pero también todo lo relativo a la navegación, el equipo de audio, etcétera. Además es bastante flexible, ya que permite dar prioridad a unas cosas sobre otras, en función de las apetencias del conductor. Por ejemplo, si en un momento dado necesita estar muy alerta del navegador, éste puede ocupar más espacio en la pantalla en detrimento de los relojes, que se hacen pequeños y pasan a un segundo plano.
Todo esto, unido a otros sistemas como la ruleta MMI -ahora simplificada con menos botones y con una nueva función táctil- está enfocado a reducir las distracciones y aumentar la atención sobre la carretera. Cada vez hay menos botones en la zona de la consola central y, por lo tanto, cada vez se hace menos necesario enfocar la vista hacia otro sitio que no sea el frente. Según comentan en la marca, la seguridad aumenta de forma notable gracias a estos elementos.
Motores y lanzamiento al mercado
En el apartado mecánico, tres serán las opciones disponibles en el momento del lanzamiento al mercado. Una diésel y las otras dos de gasolina. A continuación, a modo de pequeña ficha técnica, citamos todos los datos que ha revelado Audi sobre ellos.
- 2.0 TDI | Potencia: 184 CV; par máximo: 380 Nm; velocidad máxima: 235 km/h; consumo medio: 4,2 l/100 km; emisiones CO2: 110 g/km
- 2.0 TFSI S tronic | Potencia: 230 CV; par máximo: 370 Nm; velocidad máxima: 250 km/h; aceleración 0-100 km/h: 5,3 segundos; consumo medio: 6,8 l/100 km; emisiones CO2: 158 g/km.
- 2.0 TFSI (Audi TTS) | Potencia: 310 CV; par máximo: 380 Nm; velocidad máxima: 250 km/h; aceleración 0-100 km/h: 4,7 segundos; consumo medio: 7,1 l/100 km; emisiones CO2: 164 g/km.
La tracción integral quattro también estará presente, por supuesto, en el Audi TT 2014. Aunque en este caso se trata de una versión mejorada, con nuevo hardware y componentes mejorados. Su misión sigue siendo repartir el par entre ambos ejes en función de las necesidades de tracción y, por primera vez, se asocia al 'Drive Select'. De esta manera, cuando se elige un modo de conducción deportivo, el sistema no sólo modifica la respuesta del acelerador o la dirección, sino que manda más fuerza al eje trasero para ofrecer una respuesta más deportiva.
En el apartado tecnológico cabe citar también la llegada los faros Matrix LED, que ya conocíamos en el Audi A8. Es una de las tres opciones posibles, situada en el top de iluminación del TT, por delante de los faros de xenón y los faros LED. Su misión es alumbrar de forma óptima la carretera evitando deslumbrar a los coches o incluso peatones que vienen de frente, gracias a que puede discriminar con su haz de luz determinadas zonas. De esta forma se puede circular con las luces largas siempre que se quiera, sin peligro alguno de cegar a los demás usuarios de la vía.
El nuevo Audi TT llegará al mercado en apenas unos meses. No hay fecha concreta, pero en la marca nos comentan que muy probablemente la toma de contacto dinámica la podremos hacer en verano y, a la vuelta del mismo, empezará a llegar a los concesionarios.