El Salón de Pekín está a punto de abrir sus puertas, y justo en plena víspera, la firma nipona ha manifestado su intención de fabricar en China y para China nada menos que cinco modelos que irán saliendo a producción, progresivamente, durante los próximos cinco años. El primero de ellos será el Infiniti Q X50, un SUV que, en principio, no veremos cruzar nuestras fronteras. | Vía libre a las marcas extranjeras para vender coches en China: adiós a la asociación obligatoria con las locales.
Ronal Krueger, presidente global de la compañía, ha sido quien ha contado la noticia, mientras resaltaba la importancia que tiene el mercado chino en la propia marca. En 2017 se vendieron aquí 48.408 coches, lo que representa un crecimiento del 17% respecto al año anterior y deja a la vista que es el país que más aumentó sus ventas porcentualmente.
Aprovechando la ocasión, Krueger también ha hablado sobre los planes de futuro en materia de electrificación. Según sus propias palabras, en 2025, más del 50% de los nuevos modelos vendidos a nivel global y en China en particular, contarán con algún componente eléctrico en su mecánica, bien como parte de sistemas híbridos o bien como eléctricos puros.
Junto a su socio Dongfeng Motor Company, que es un gigante asiático de la automoción, Infiniti persigue la localización en China y con la vista puesta en ese mismo mercado. También como parte de esta unión surge el desarrollo de nuevas tecnologías que veremos implementadas dentro de poco tiempo. Hablamos, por ejemplo, de la compresión variable en los motores turbo (VC-Turbo) o la tecnología e-Power de electrificación.
El Salón de Pekín mostrará sus novedades al mundo esta misma semana, y en el stand de la marca japonesa lo primero que veremos será el Infiniti QX50, un SUV que llega para cubrir la demanda de un segmento aún en fase de expansión. Este todocamino, que se fabricará en la planta local de Dalian, llegará a finales de este año sólo al mercado chino.
Otro modelo que se dejará ver en la feria asiática es el Infiniti Q Inspiration concept car, modelo que anticipa las líneas maestras de diseño de los futuros modelos de la marca, y más concretamente, de las berlinas propulsadas por motores eléctricos. No sabremos si habrá más sorpresas en el salón de Pekín, aunque es muy probable, dado que son cinco los modelos que la compañía pretende lanzar al mercado en el próximo lustro.