
Techrules, la empresa china que se dio a conocer en el Salón de Ginebra de 2016, cumplirá su promesa y presentará en la prestigiosa cita automovilística de este año la versión de producción de su superdeportivo eléctrico de autonomía extendida por medio de dos turbinas de gas, el GT96.
Su sistema de propulsión TREV (Turbine-Recharging Electric Vehicle) no es ninguna novedad puesto que se exploró su utilidad para los automóviles en los años 50 del pasado siglo, pero lo que sí es original en estos momentos es utilizarlo como generador de electricidad para alimentar las baterías de un híbrido. Dicha turbina productora, que puede ser alimentada por gas o keroseno de aviación, permite al Techrules GT96 gozar de una autonomía de hasta un 2.000 km con un depósito lleno.
Además, la carrocería está íntegramente fabricada en fibra de carbono y dispone seis motores eléctricos, dos para las ruedas delanteras y cuatro para las posteriores. Todos juntos aportan una no menos impresionante potencia de 1.000 CV y una fuerza instantánea descomunal de 8.600 Nm.
La firma ha confirmado que el chasis ha sido fabricado por una empresa icónica de este terreno como es LM Gianetti, y su diseño ha sido ideado por Giorgetto y Fabrizio Giugiaro. El resultado es un un vehículo de diseño futurista y "aerosespacial", tal y como define el fabricante, en el que predominan los faros láser, LED en el caso de los posteriores, y cámaras de visión trasera integradas, entre otros.
En cuanto a la fabricación, será la propia L.M Gianetti quien la lleve a cabo y tan solo se crearán 25 unidades destinadas a ser utilizadas como coches de competición en circuito cerrado. Posteriormente, ya en 2018, saldría a la venta una versión homologada para ser matriculada y que daría pie a modelos más asequibles desarrollados por la marca pekinesa y que estarían dotados de la misma tecnología híbrida que el hiperdeportivo GT96.