
El pasado mes de julio recibimos noticias de una nueva marca norteamericana, con participación accionarial de origen chino, que anunciaba la construcción de una planta industrial para iniciar su actividad comercial en 2017. Algunos especulan con que detrás de esta poderosa start-up se encuentra el proyecto de automóvil de Apple.
Michael Faraday, el científico inglés que aportó grandes conocimientos en el campo del electromagnetismo y la electrolisis, cede así su nombre a la nueva firma especializada en coches eléctricos y que da réplica a su "alumno" Nicola Tesla en el mundo del automóvil.
Sin que se sepa todavía quien es el responsable de esta enigmática empresa, unas declaraciones al Wall Street Journal de un portavoz han desvelado que la plantilla sería ya de unas 400 personas y que la poderosa start-up tendría un importante respaldo financiero.
1.000 millones de dólares
Por lo pronto Faraday Future ha invertido mil millones de dólares en la primera planta de la marca, probablemente ubicada en Nevada, y que anuncia ser lo más avanzado en este campo. De paso, la nueva firma automovilística lanza un importante órdago al sector, al declarar que el nuevo modelo por llegar en 2017 dispondrá de un 15 por ciento más de autonomía que el Tesla Model S.
No dejan de sorprender estos plazos tan cortos, sobre todo para una desconocida empresa que acaba de iniciar su actividad en el mundo del automóvil. Lo que sí ha conseguido ya Faraday es llamar la atención y la curiosidad de propios y extraños, alimentada además por el aura de secretismo que rodea a este ambicioso proyecto.
Los rumores que van desvelando los detalles de la empresa confirmarían la importancia real de la empresa. Se comenta que el misterioso financiero que está detrás de la marca sería el multimillonario chino Jia Yueting, propietario de la marca de móviles LeTV. Por otro lado, se comenta que para el "staff" de Faraday se habrían fichado a exresponsables de Tesla, General Motors, Ford y BMW.
La marca ha dejado ya entrever unas sugerentes imágenes en las que se vislumbra el aspecto del nuevo automóvil y de las que se deduce que pudiera haber dos versiones diferentes desde el momento de su lanzamiento. La comercialización no sólo traería grandes novedades tecnológicas, el Faraday también será revolucionario en el plano de la adquisición, uso compartido, aplicaciones, conectividad y conducción autónoma.