
Ni radios, ni limpiaparabrisas... La última tendencia entre los ladrones que se dedican a desvalijar coches viene de Estados Unidos: las baterías de los coches híbridos y, en especial, las de los Toyota Prius.
La alarma ha saltado después de que varios distribuidores del área de San Francisco hayan alertado sobre numerosos casos de clientes que han acudido a su servicio para que les reemplacen las baterías de sus Prius tras haber sido robadas, según una información de KGO-TV, filial de la network ABC, de la que se ha hecho eco el portal Yahoo.
Pero ¿por qué roban baterías de Prius? Resulta que las primeras unidades que se vendieron de este modelo están llegando ya al límite de 8 años o 100.000 millas que cubre la garantía y a partir del cual se recomienda su sustitución. El problema es que una nueva cuesta alrededor de 3.000 dólares, mientras que una usada en el mercado de segunda mano puede caer hasta cerca de los 500 euros. Esta circunstancia ha disparado significativamente la demanda, lo que a su vez ha sido visto como una oportunidad para el negocio de los ladrones especializados.
Modus operandi
Eso sí, cabe aclarar que el robo de una batería no es tan sencillo de acometer como extraer una radio, ni mucho menos. Su peso supera los 50 kilos y alguien que no conozca su estructura y funcionamiento puede acabar electrocutándose. Además, el tiempo preciso para robar una de estas baterías no es menor: los mecánicos suelen tardar del orden de una hora para su extracción, aunque parece que los ladrones han logrado rebajar la marca hasta los 20 minutos.
El modo de proceder, similar en todos los casos que han sido denunciados, por lo que se especula con que sea una banda especializada, es el siguiente: rompen las ventanas traseras, cortan todos los cables de conexión (según un concesionario Toyota, la batería no emite energía cuando el coche está apagado), y proceden a extraer la batería del módulo correspondiente.
El coste estimado para reparar el daño derivado de todo el proceso de robo se estima en alrededor de 7.000 dólares, pues los ladrones no solo se llevan la batería, sino que también dañan muchos componentes de cableado costosos de reemplazar en la reparación.
La paradoja del Prius
El caso del robo de baterías de Prius resulta paradójico, toda vez que hace unos años este modelo de Toyota era el menos robado en Estados Unidos por la baja demanda de su poco popular tecnología en el mercado negro.