
Llevamos cinco carreras de MotoGP y podemos decir que esta temporada no parece ser la de Marc Márquez. El piloto español lleva tan solo una victoria, la lograda en Austin, por las dos de Jorge Lorenzo y Valentino Rossi.
Varias son las causas que han provocado este inesperado bajón en el rendimiento tanto de Márquez como de Honda. La primera y la más clarividente es que la Honda de este año no es la del año pasado. Eso es evidente, los resultados hablan por sí solos. Aunque en realidad la Honda de este año tiene más potencia, pero eso no significa que se pueda sacar el máximo rendimiento en estos momentos.
Otra de las causas está relacionada con los frenos en la Honda de Marc. La conducción de Márquez se caracteriza principalmente por su 'agresión' en la pista. Ahí es donde el piloto catalán derrapa más que los demás y consigue girar la moto hasta límites insospechados. Este año parece que no consigue esas sensaciones ya que le han colocado un freno trasero más grande.
En cuanto a la carrera de esta tarde en Le Mans, Márquez ha estrenado un nuevo basculante un poco menos rígido. El de Cervera comentó que iba mejor cuando el neumático está gastado, pero al acelerar y ser menos rígido la moto se mueve más.
Todas estas cosas y alguna que otra más tendrá que mejorar Márquez para la siguiente carrera, que se disputará dentro de dos semanas en Mugello (Italia).