El futuro de Robert Kubica se vio truncado tras el accidente que sufrió el pasado mes de febrero cuando corría un Rally. No sólo porque no pudiera disputar la temporada de F1 que acaba de finalizar; también porque, así, se frustró su fichaje por Ferrari en 2012, del cual existía ya un preacuerdo entre ambas partes.
Por eso, debía haber sido Kubica quien fuera compañero de Fernando Alonso ya en 2012, y no Felipe Massa como al final va a suceder. La larga lesión de Kubica ha obligado a Ferrari a posponer la elección del sucesor del piloto brasileño.
Según publica el diario digital elconfidencial.com, el fichaje de Kubica para 2013 habría sido puesto en cuarentena a la espera de comprobar su evolución física. Tal y como obró la Scuderia cuando contrató a Kimi Räikkönen o Fernando Alonso, la llegada de Kubica a Maranello iba a ser firmada con varios meses de antelación, pero las lesiones del polaco truncaron toda la operación.
Un círculo vicioso que oscurece el futuro de Kubica
Mientras, Renault también ha dado de lado a Kubica, quien será sustituido por el propio Räikkönen, tras las sospechas de que aquél no iba a estar en condiciones de afrontar el inicio de temporada. En principio, se trataba de un aplazamiento de su vuelta a la F1, pero desde la escudería dirigida por Eric Boullier ya se advirtió hace unos días de que no ayudarían a Kubica si éste va a marcharse a Ferrari, por lo que, en estos momentos, es bastante probable que el polaco se quede una temporada más en blanco. Y así, su fichaje por la escudería roja se complicaría, si cabe, todavía más.
Por ello, en Maranello barajan ya otras opciones para relevar a Massa 2013. Sergio Pérez, actual piloto de Sauber, parece ser el mejor colocado, si bien suenan ya otros nombres como los de Jules Bianchi, Nico Rosberg, Mark Webber e, incluso, aunque con menos posibilidades, Lewis Hamilton.
De Villota a Renault