Borja Thyssen y Blanca Cuesta ya disfrutan de su cuarto retoño, una preciosa niña de nombre Kala que ha venido a colmar de felicidad a toda la familia. Manolo Segura acudía un día más a visitar a su nieta en el Hospital Rúber Internacional donde madre e hija continúan ingresadas.
La menor de los cuatro hijos del matrimonio nació el domingo alrededor de las 20:20 de la noche con un peso de 3,7 kilos. Fue en el hospital Ruber Internacional de Madrid, el mismo lugar donde vino al mundo su hermano Enzo hace dos años.
La llegada de la nueva nieta de Tita Cervera se produjo sin problemas, aunque no como estaba planeado en un principio: los médicos decidieron cancelar el parto programado previsto para mediados de la semana pasada, ya que Blanca Cuesta padeció unos pequeños problemas de salud que le provocaron unas décimas de fiebre.
No cabe duda de que el nacimiento de su cuarta hija parece ser el broche definitivo a la reconciliación de la baronesa Thyssen y su hijo, tras varios años de distanciamiento. El pasado verano, madre e hijo sellaban la paz y retomaban su relación materno-filial, después de varios conflictos con denuncias y cruce de declaraciones de por medio.
La tensión llegó hasta tal punto que la baronesa no acudió a la boda de su único hijo con Blanca y ni siquiera estuvo presente en algunos de los nacimientos y bautizos de sus nietos. Ahora, las aguas han vuelto a su cauce y la pequeña Thyssen puede venir con una memorable foto de reconciliación debajo del brazo.
Si no hay complicaciones de ningún tipo, madre e hija recibirán el alta hospitalaria dentro de pocos días para empezar a disfrutar de su nueva vida junto a sus tres hermanos, Sacha, Eriz y Enzo.
Manolo Segura ha visitado durante estos días a su nuera y a su nieta en el centro hospitalario. Y es que desde que naciera la pequeña, el empresario aprovecha al máximo para disfrutar de ella en su tiempo libre. Ahora que el matrimonio está en casa con la pequeña seguro que Manolo pasa muchas tardes en casa de su hijo con su nieta Kala.
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