
Las protestas violentas de grupos de musulmanes se han extendido en Níger, donde hasta ocho personas han perdido la vida y se han incendiado siete iglesias, mientras que el presidente francés, François Hollande, reiteraba este sábado su compromiso con la libertad de expresión.
Tras la tradicional oración semanal, miles de personas se habían manifestado el viernes en el mundo musulmán, en países como Senegal, Argelia, Afganistán y Níger, contra la nueva caricatura de Mahoma publicada en la portada de Charlie Hebdo.
En Níger, tras la muerte de cuatro personas la víspera, se registraron nuevas manifestaciones, incluso en Niamey, y la quema de siete iglesias.
Consignas contra Francia
Hacia mediodía, varios centenares de jóvenes se reunieron cerca de la Gran Mezquita de Niamey, bajo la consigna "Abajo Francia" y "¡Alá akbar!" ("¡Dios es grande!"), pese a que las autoridades habían prohibido las manifestaciones.
El gobierno de Francia exhortó a los franceses residentes en la capital nigerina a no salir de sus viviendas, máxime cuando la violencia se ha extendido a varios barrios de Niamey.
Varios bares, hoteles y comercios pertenecientes a personas no musulmanas o que tenían algún cartel de alguna marca francesa también fueron destruidos.
En su primera reacción tras las violentas protestas en varios países musulmanes, particularmente en África, el presidente francés subrayó este sábado el compromiso de Francia con la libertad de expresión, una semana después de los atentados yihadistas en París, que dejaron 17 víctimas. "Francia tiene principios y valores y entre esos valores se encuentra sobre todo la libertad de expresión", dijo Hollande.
Posteriormente, el ministro de Relaciones Exteriores francés, Laurent Fabius, condenó "el recurso a la violencia" en Níger.