
El director ejecutivo global de los 'ratings' de la agencia estadounidense de calificación Standard & Poor's (S&P), Paul Coughlin, ha analizado la actualidad económica española y los posibles cambios anunciados por el Gobierno.
En una entrevista concedida a 'El Mundo', ha asegurado que "cambiar la Constitución no resolverá los problemas" del país. "Ese nunca ha sido el problema de España", afirma, sino que "los problemas fundamentales son el déficit por cuenta corriente, la falta de competitividad o la burbuja inmobiliaria, y como en Italia, la falta de flexibilidad del mercado laboral".
"Lo que hemos visto son más dificultades con los Gobiernos regionales. Algunos son más entusiastas en la financiación del déficit que el Gobierno central, pero esto no se resuelve fácilmente porque depende de problemas fundamentales en la política española", prosigue Coughlin.
El analista, que reconce "el esfuerzo" del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, considera que desde España no termina de comprenderse la decisión de la agencia de bajar el 'rating' de la deuda del país.
"Siempre hay resentimiento popular. Disparar al mensajero es normal. En Asia nos decían 'sois americanos, no nos entendéis'. Es un argumento que también suena en España, argumenta.
En lo relativo a la crisis de la zona euro, Coughlin cree que "cuando se creó esta moneda, se pensó que se había acabado con el riesgo soberano en Europa, pero fue peor para países que tenían problemas de competitividad, como Grecia, Italia o España".
"Hay que hacer verdaderas reformas del mercado laboral para reducir costes, y es muy difícil cambiar esto de la noche a la mañana", asegura.
Coughlin concluye con otra advertencia hacia el 'viejo continente', al afirmar que "son europeos los que toman decisiones sobre la deuda europea, y no hay favoritismo ni discriminación".