
La agencia de calificación crediticia Fitch explicó hoy que los 99.000 millones de endeudamiento previstos por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) son más que suficientes para cubrir cualquier pérdida potencial que tuvieran que afrontar las entidades españolas. Sin embargo, los expertos de RBS creen que los bancos necesitan inyecciones de capital por 50.000 millones y que España debe recurrir al fondo de rescate de la UE y el FMI. El fondo de rescate del euro estará listo "sin ninguna duda" este mes.
Según la entidad británica, aunque espera que los test de estrés arrojen unas necesidades de capital de 20.000 millones de los bancos españoles, esta cifra no será suficiente y harán falta recapitalizaciones por más del doble.
Además, RBS considera que las pérdidas del sistema financiero de España alcanzarán los 400.000 millones de euros, equivalentes al 40% del PIB, según un informe citado por Expansión.
Tres posibles escenarios
El informe de Fitch, por su parte, detalla tres posibles marcos en los que las entidades financieras españolas tendrían que acudir al FROB.
En el primero de ellos los préstamos impagados crecerían el 50% y las pérdidas el 70%, un supuesto en el que las entidades españolas necesitarían 23.000 millones de euros para cubrirse.
De empeorar la situación, tal y como ocurrió en Irlanda, este importe se elevaría hasta 49.000 millones de euros, y en el peor de los casos, si cayera de forma aguda el precio de la vivienda, crecería hasta 88.000 millones.
Según la directora senior de Instituciones Financieras de Fitch, Carmen Muñoz, los 99.000 millones de euros previstos por el FROB son más que suficientes, porque a ellos hay que añadir las provisiones ya establecidas por bancos y cajas.
Las cajas pedirán más ayudas que los bancos
No obstante, Muñoz señala que las cajas de ahorros acudirán en mayor medida que los bancos al Fondo dada su mayor exposición a activos inmobiliarios.
El informe distingue entre las distintas entidades, y recuerda que el comportamiento de La Caixa -y, por lo tanto, la calificación que le otorga Fitch- es muy distinto del de entidades como Caja Castilla La Mancha o Cajasur.
El estudio precisa que el análisis de las entidades financieras españolas no supone ninguna indicación de cuál será la evolución de sus balances, y reitera que pretende medir la capacidad del sistema financiero español ante situaciones límite.