Los carburantes vendidos en las estaciones de servicio españolas tienen buena calidad, de acuerdo con la información remitida por el Gobierno a la Agencia Europea del Medio Ambiente en cumplimiento de la normativa europea. Así lo indica el último informe preparado por la entidad al respecto, divulgado ayer.
Según el documento, durante 2015 se tomaron 400 muestras de gasolina y 200 muestras de gasóleo, que se analizaron para comprobar su grado de cumplimiento en relación a los parámetros fijados por la legislación comunitaria. Ninguna de las muestras de diésel registró desviación alguna y solo siete de las muestras de gasolina registraron desviaciones en el grado de octanaje (tres), en la presión de vapor en verano (tres) y en el contenido de oxígeno (una).
Alemania, sobre 843 muestras de gasolina y 400 de diésel, registró 22 y una desviaciones, respectivamente. Francia, sobre 416 muestras de gasolina y 222 de gasóleo, solo falló en ocho de la primera. Portugal, sobre 265 muestras de gasolina y 470 de diésel, fallo en siete y en dos, respectivamente. El país con más errores fue Reino Unido, con 33 en gasolina y uno en diésel, pero sobre 1.351 y 2.414 muestras.
