El escándalo que afecta a Volkswagen por haber manipulado las cifras de emisiones en motores diésel de varios modelos afecta también a Seat: el fabricante español montó unos 500.000 propulsores como los investigados en Estados Unidos desde 2009. ¿Cómo actuar si se ve afectado?
Así lo reconoce la propia compañía, aunque sin confirmar o desmentir la cifra, en una información de El País: la matriz Volkswagen fabricaba los motores EA189 y luego se los vendía a sus filiales, entre las que se encuentra Seat. Desde Martorell, no obstante, aclaran que los motores señalados no son utilizados actualmente en el ensamblaje en sus instalaciones.
El Ministerio de Industria, Energía y Turismo ha constituido un grupo de trabajo, con el ministro José Manuel Soria al frente, para analizar "minuto a minuto" todo lo que está sucediendo con el 'caso Volkswagen', según informó ayer la secretaria general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresas, Begoña Cristeto.
Según esta, Industria se ha puesto en contacto "rápidamente" con los responsables de Volkswagen en España, "no solamente por los vehículos Volkswagen, sino porque estamos preocupados por los vehículos Seat, que sí que están homologados por el Ministerio, por la Dirección General de Seguridad y de Calidad".
Igualmente, Industria se ha dirigido a la Unión Europea, ya que considera que el asunto debe ser tratado de una manera conjunta en las instituciones comunitarias, para que "establezca las medidas que se deben tomar para solucionar el problema que tenemos sobre la mesa, pero también para que este tipo de actuaciones no se vuelvan a producir", manifestó.
Preocupación entre los trabajadores
Por su parte, la plantilla de Seat confía en que la crisis en el consorcio alemán por la manipulación de datos sobre emisiones de CO2 en algunos de sus modelos diésel no afecte a las inversiones previstas en las plantas españolas, la mayor parte en la de Seat en Martorell (Barcelona), de 3.300 millones de euros en cinco años.
El presidente del comité de empresa de Seat, Matías Carnero, explicó ayer que dentro de dos semanas está prevista la celebración del comité europeo y mundial de Volkswagen, en el que periódicamente se informa a las representaciones sindicales de las diferentes plantas del consorcio de la evolución del grupo y de los planes futuros.
Además, Carnero ha declarado hoy que "la empresa ha puesto en marcha un mecanismo para averiguar cuántos motores hay afectados". Según Carnero, "los motores vienen hechos de Alemania, con su homologación y certificación, por lo que en Seat se han estado montando de forma profesional y con desconocimiento total de lo que se estaba haciendo en la fábrica de motores con el mapeo de la centralita".
La plantilla confía en que este encuentro sirva para desvelar las incógnitas sobre las futuras adjudicaciones a la planta catalana, entre las que se especula con la producción del Audi A1.
Carnero ha argumentado que las inversiones anunciadas no deberían quedar afectadas porque son unas cifras que ya están aprobadas.