Salir de viaje en esta Semana Santa no será tan costoso como en años anteriores. El precio de la gasolina y del gasóleo es el más bajo desde la operación salida de 2011 al situarse el gasóleo en 1,319 euros por litro (1,30 euros en 2011) y la gasolina en los 1,399 euros ( 1,35 euros en 2011), tal y como se recoge en los datos del pasado 7 de abril del Boletín Petróleo de la Unión Europea. Consulte el gráfico con la evolución de los precios de los carburantes.
Si comparamos los precios actuales con las cifras registradas el año pasado, el precio del gasóleo ha caído un 3,16 por ciento, ya que se pagaba a 1,362 euros por litro y el precio de la gasolina, que se situaba en los 1,452 euros por litro, se ha reducido un 3,65 por ciento, lo que supone un alivio para los bolsillos de los consumidores.
De este modo, llenar un depósito medio de 50 litros de gasolina cuesta este año casi dos euros menos que el pasado, ya que supone pasar a pagar 69,95 euros frente a los 72,15 euros del 2013.
Para el gasóleo, el recorte es superior, ya que rellenar el tanque supone cerca de 65,95 euros, es decir, 2,55 euros menos que el año anterior, que costaba 68,5 euros.
Las vacaciones de Semana Santa son una de las épocas del año en las que es habitual que el precio del carburante suba al calor del mayor número de desplazamientos -este año la Dirección General de Tráfico (DGT) estima que alcanzarán los 12,5 millones-.
En los últimos cuatro años la tendencia es que el precio de los carburantes se incremente alrededor de un céntimo por litro, una vieja tradición que suele extenderse a otras festividades con también una gran afluencia del número de desplazamientos por carretera.
Buscar el menor precio
El conductor, además, puede ahorrarse entre seis y ocho céntimos por litro en función de la gasolinera que elija para repostar en Madrid, Barcelona y Valencia (las tres provincias tienen aplicado el céntimo sanitario, aunque en la capital se grava menos, 1,7 céntimos).
Según los datos del Ministerio de Industria, el precio del gasóleo en Madrid oscila entre los 1,23 euros por litro del hipermercado E.Leclerc y los 1,29 euros de la gasolinera Shell.
En el caso de Barcelona, quien ofrece el gasóleo más barato es una estación de servicio de Makro (1,258 euros por litro) y el más caro, BP, donde el litro cuesta 1,329 euros.
En Valencia, la Estación de Servicio Soriano es la que ofrece un precio más económico con 1,289 euros por litro de gasóleo, frente a los 1,349 euros que cobra Carrefour.
En el caso de la gasolina, los precios oscilan entre los 1,329 de la estación de servicio de E. Leclerc y los 1,389 euros por litro de otra de Galp en Madrid; entre los 1,352 de Lluvir y los 1,439 euros de Meroil en Barcelona, y entre los 1,365 euros de Taxco y los 1,442 euros de Repsol por litro en Valencia.
En las últimas dos semanas el precio del gasóleo se ha mantenido estable en los 1,319 euros por litro, mientras que la gasolina ha vivido un repunte del 0,07 por ciento en el mismo período de tiempo.
Según los datos del Boletín Petrolero, el precio de la gasolina ha escalado desde los 1,398 a los 1,399 euros por litro desde el 31 de marzo, librándose durante las últimas cinco semanas de superar el umbral de los 1,40 euros por litro que ya sobrepasó en la antesala de la operación salida de las vacaciones de Semana Santa de 2012 y 2013.
Sube el 'Brent'
El aumento del precio de la gasolina coincide con la revalorización del precio del petróleo. En estos momentos el barril Brent, de referencia en Europa, cotiza a 109,11 dólares, frente a los 107,76 dólares que tenía que desembolsar el comprador hace quince días. No obstante, hay que remontarse a principios de marzo para ver esporádicamente al petróleo Brent cotizar por encima de los 110 dólares por barril.
No es ninguna novedad que las gasolineras suban los precios del combustible coincidiendo con las vacaciones. Esta tendencia, junto a otras como el efecto lunes, ha sido denunciada en varias ocasiones por la Comisión Nacional de los Mercado y la Competencia (CNMC) con el fin de evitar la alineación general de precios entre los principales operadores de carburantes de nuestro país. ¿Resultado? En septiembre del año pasado desapareció el efecto lunes, que consistía en bajar los precios del combustible coincidiendo con la comparación de los precios con el resto de Europa, para luego subirlos otra vez.
Una media que supuso abrir un proceso sancionador en julio de 2013 contra los principales operadores de nuestro país (Repsol, Cepsa o Galp, entre otros), por el que las presuntas empresas infractoras se enfrentan a una multa que puede ascender hasta el 10 por ciento de su volumen de negocio. Además, el pasado día 8, se amplió dicho expediente sancionador contra BP España. Asimismo, el regulador también da por concluido el efecto viernes, provocado por la oferta estival de Repsol, pero continúa el fenómeno de cohetes y plumas, es decir, de fuertes subidas cuando el petróleo sube y lentas bajadas cuando desciende.
Las petroleras se encuentran en estos momentos en una dura batalla comercial. La fuerte caída del consumo y la caída de los márgenes del refino, supone a las compañías un duro golpe en sus cuentas. Para ello, las empresas han abierto una fuerte pelea por ampliar su cuota de mercado, al mismo tiempo que el Gobierno ha impuesto limitaciones para el crecimiento de las tres mayores compañías: Repsol, Cepsa y BP.
Gasolina y diésel mantienen precios