La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) advirtió ayer de que algunas enmiendas introducidas en el trámite parlamentario de la nueva Ley de Hidrocarburos generan un "efecto desfavorable" que reduce la competencia dentro de la actividad de comercialización de carburantes, informa Europa Press.
En estos cambios parlamentarios se introdujeron varias excepciones a las nuevas restricciones a los contratos en exclusiva entre los operadores y los empresarios de estaciones de servicio.
Este nuevo endurecimiento de los contratos en exclusiva incluye dos novedades. La primera consiste en una duración máxima del contrato de un año prorrogable a tres, mientras que la segunda prohíbe las cláusulas que "fijen, recomienden o incidan, directa o indirectamente" en el precio de venta al público del combustible. Además, se fija un periodo de adaptación de doce meses a la nueva normativa.
Durante la tramitación parlamentaria de la nueva ley se añadió un apartado en el que se excluían de estas restricciones los casos en los que los locales y los terrenos fuesen propiedad del proveedor.
Para la CNMC, pueden tener justificación las excepciones acerca de la duración máxima de los contratos, pero no las referidas a la prohibición de cláusulas que fijen, recomienden o incidan en el precio. Por este motivo, recomienda que se modifiquen los cambios introducidos, lo que permitirá "reforzar la seguridad jurídica".