El piloto finlandés de Ferrari, Kimi Raikkonen, protestó durante el Gran Premio de China de Fórmula-1 por la lentitud de los McLaren, entre ellos el del español Fernando Alonso, excompañero de equipo suyo en la Scuderia.
Raikkonen tuvo problemas para adelantar a una de las flechas plateadas, durante uno de los doblajes. La presencia inesperada de Alonso alteró su estado de ánimo y provocó una reacción airada por su parte.
"Quitad a ese McLaren de mi camino", llegó a gritar a través de la radio. Sin embargo, los McLaren no fueron los únicos que le estorbaron, ya que posteriormente también gritaría "quitadme a esos coches de delante" al intentar doblar a Pastor Maldonado y al compañero de Alonso, Jenson Button.
Alonso no quiso entrar en la polémica y se limitó a asegurar que "supongo que vamos muy lentos comparado con ellos", reconociendo la debilidad de su monoplaza.