
Mazda ha actualizado la gama de motorizaciones de su modelo Mazda3 con la introducción de un nuevo propulsor diésel CRTD de 1.6 litros common rail, que está adaptado a la normativa europea Euro 5 y está asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades.
Esta nueva mecánica desarrolla una potencia máxima de 115 caballos y permite al Mazda3 contar con un consumo de 4,4 litros de gasóleo cada cien kilómetros recorridos y tener unas emisiones de dióxido de carbono de 117 gramos por kilómetro.
El nuevo motor que incorpora el Mazda3 posee un nuevo turbocompresor de geometría variable y un nuevo sistema de inyección que permiten, además de mejorar las prestaciones, reducir un 2,2% el consumo de combustible y un 1,7% las emisiones de dióxido de carbono. Igualmente, esta motorización tiene filtro de partículas (DPF) que, ahora, está exento de mantenimiento.
También se moderniza el exterior y el interior
La segunda generación de este automóvil cuenta con un diseño exterior más dinámico y expresivo respecto a su predecesor, con la imagen de familia de la marca con la integración de la sección inferior de la parrilla delantera en la parrilla de cinco puntas.
En la parte interior, este vehículo utiliza nuevos materiales en la parte superior del salpicadero y posee una consola central con reposabrazos deslizante (en función del acabado y del mercado), así como una gran ergonomía caracterizada por la distribución por zonas para evitar distracciones al volante.
El Mazda3 puede equipar, dependiendo del acabado, elementos como el sistema de sonido envolvente de alta calidad Bose con 10 altavoces y compensación del ruido, los asientos deportivos, el sistema de iluminación de bienvenida o el dispositivo manos libres para teléfonos y reproductores de audio portátiles.