Otro revés en bolsa para Grifols: cae un 5,4% por una demanda en EEUU y supuestas complicaciones en la opa

Grifols ha encabezado las caídas en la bolsa española este martes. El precio de sus acciones cotizadas en el Ibex 35 ha llegado a caer más de un 7% a menos de 8,15 euros, mínimos desde principios de julio. Al cierre ha perdido un 5,39%, hasta los 8,25 euros, con lo que la biotecnológica acumula en las últimas cuatro sesiones (incluida la de hoy) unas pérdidas en el parqué que rondan los siete puntos porcentuales. Y aumentan a cerca del 50% si se echa la vista más atrás, hasta la pasada Nochevieja. El fabricante de hemoderivados comenzó 2024 cotizando por encima de 15,45 euros el título. Pero ¿a qué se debe el retroceso de la cotización de hoy?

Desde que comenzó el ejercicio Grifols ha sufrido varios desplomes en bolsa debido a las reiteradas acusaciones de fraude en sus cuentas por parte de Gotham City Research.

El organismo supervisor español, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), concluyó el pasado marzo que había "deficiencias relevantes" en los resultados de los últimos años pero descartó que el fabricante de hemoderivados cometiera fraude contable. Sin embargo, eso no fue suficiente para impulsar de forma sostenible la cotización.

Tampoco sirvió de revulsivo el balance del primer trimestre de este año ni el del segundo. Las reticencias sobre la empresa son de tal magnitud que la CNMV suspendió de forma cautelar la cotización de Grifols hace dos semanas, durante menos de dos horas, justo antes de que esta diera a conocer sus cuentas de abril-junio pasados.

Una demanda colectiva en EEUU

Para más inri, Grifols podría enfrentarse a una nueva demanda colectiva al otro lado del Atlántico, donde sus acciones también cotizan (en el Nasdaq). De hecho, tras la apertura de Wall Street baja alrededor de un 6,5%, al filo de los 6,7 dólares por participación.

Schall Law Firm, un despacho de abogados con sede en Los Ángeles y especializado en derechos de accionistas, está investigando distintas reclamaciones de inversores de Grifols. En otras palabras: está iniciando una demanda colectiva (class action, en inglés) contra el grupo español por, según han defendido, "violaciones de las leyes bursátiles" estadounidenses.

"La investigación se centra en si la empresa emitió comunicados falsas y/o engañosos y/o no reveló información pertinente a los inversores", señaló Schall Law en un comunicado publicado este lunes. En él hace referencia al primer informe de Gotham City contra Grifols, el cual salió a la luz el 9 de enero de este año.

Supuestas complicaciones en la opa

En paralelo, la familia Grifols (fundadora del grupo) y el fondo Brookfield están estudiando hacer una oferta pública de adquisición (opa) conjunta sobre todo el capital de la compañía, con el fin último de excluirla de bolsa. Actualmente ambos 'socios' están llevando a cabo la diligencia debida (due diligence), es decir, están analizando a fondo los números de la biotecnológica. Y es aquí donde surge la otra razón por la que Grifols ha bajado con fuerza en bolsa esta jornada.

Brookfield ha mostrado desconfianza respecto la manera en que la firma catalana contabiliza sus filiales, al menos la de China, según informa OkDiario.

Dicha web cita a fuentes conocedoras de la situación según las cuales las cuentas consolidadas de Grifols "no son correctas porque se aplican criterios contables de suma de las contabilidades de las filiales, pero algunas de ellas tienen criterios contables locales que no son de aplicación en España". Por el momento elEconomista.es no ha podido confirmar esta información.

Precisamente la forma de computar las ganancias o pérdidas de las filiales ha sido el eje central de las numerosas críticas de Gotham City Research que se desataron hace ya ocho meses.

¿Qué hacer con las acciones?

A pesar de este annus horribilis para Grifols, los analistas continúan apostando por sus acciones. Prueba de ello es que el consenso de mercado de Bloomberg proyecta las participaciones cotizando, de media, en 16,50 euros dentro de un año. Esto implica un potencial mayor al 100% desde los mínimos de hoy (más que duplicar el actual valor bursátil).

La mayoría de firmas de análisis recogidas en el mencionado consenso recomiendan adquirir los títulos, otras cuatro (o el 20%) tienen una visión neutral y solo dos (la quinta parte restante) aconsejan deshacerse de ellos.